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La falta de personal y el auge de las patologías retrasan casi una semana las citas médicas
En centros como Arrabal la espera va a más y los usuarios tardan hasta 23 días en ser atendidos. Sanidad recuerda que el paciente grave puede llamar al ambulatorio para preguntar si hay huecos.
La falta de facultativos, unida al aumento de las patologías respiratorias e intestinales y la jornada festiva por el día del Pilar, ha derivado en que muchos pacientes, cuando van a pedir cita para su médico de Atención Primaria a través de la aplicación, se encuentren con retrasos de una semana, de media. No son todos, algunos pueden conseguir cita a los tres días, mientras que en otros, como Arrabal, las esperas se disparan hasta las 23 jornadas. "No se cubren ni las bajas, ni las vacaciones... el agotamiento es generalizado", subrayó el personal sanitario de este ambulatorio.
Desde el sindicato médico de Atención Primaria (Fasamet), su presidente, Leandro Catalán, confirmó que para lograr cita en algunos centros hay que esperar "una semana o diez días", principalmente por la jornada festiva, los permisos de los médicos y la mayor demanda asistencial. Unos tiempos que, según detalló Belén Lomba, secretaria del Colegio Oficial de Médicos de Zaragoza y facultativa de Atención Primaria en Utebo, no son compatibles con los de una enfermedad aguda. "Si uno no puede ir a su trabajo por fiebre o malestar general, hay que verlo y darle la baja. Tenemos tres días para eso", recordó, al tiempo que detalló que más allá de esas tres jornadas, el periodo de espera es "excesivo".
Este lunes había esperas de más de una semana para citarse con facultativos de Torrero-La Paz, Las Fuentes Norte, Actur Sur y Seminario. También para algunos de Sagasta y Rebolería;aunque para otros se podía conseguir hora para el jueves o el viernes. "Estamos escasos de personal y muy sobrepasados", apuntaron desde Las Fuentes Norte, tras señalar que las bajas y vacaciones "no se cubren". Además, desde el viernes la facultativa que estaba de apoyo trabaja en otro centro al haber logrado una interinidad. Y, con ello, aumentan las esperas.
A consecuencia de las jubilaciones, muchas por edad, pero también otras anticipadas tras la "presión sufrida por la pandemia", recordó Lomba que un volumen importante de puestos de médicos de apoyo, también conocidos como mac, se han quedado desiertos. Los profesionales que los ocupaban se han ido a otros ambulatorios del área metropolitana, donde hay ahora plazas por las citadas jubilaciones. "Estos días, con el festivo y el aumento de patologías, no se han podido poner estos refuerzos para evitar las demoras", subrayó. En su centro de salud, ejemplificó, faltan tres médicos y aunque tienen "consultas numerosas", la espera "se dilata".
Un problema que se repite
"Falta planificación", resumió. Y a ello se suma un déficit de educación sanitaria: "Muchas consultas son innecesarias". Para los próximos meses, la previsión no es más alentadora, ya que al igual que ha pasado estos días con el festivo, cuando comience el invierno "volverá a ocurrir". "Se repetirá con el 1 de noviembre y en Navidad. Desde la pandemia no hay un día bueno", lamentó.
Con este escenario, Catalán reclamó una mayor implicación del Departamento de Sanidad, cuya titular, Sira Repollés, todavía no ha respondido a las propuestas presentadas por su organización y los colegios de médicos hace casi dos semanas. Como solución, propuso que se siga el ejemplo de otras autonomías, que habilitan más horarios de consulta, generalmente por la tarde. "Y se ofertan como las peonadas de los hospitales: voluntarias y retribuidas", defendió.
Ante la dificultad de conseguir cita en los centros salud a través de la aplicación, desde el Departamento de Sanidad recordaron que los pacientes pueden llamar o acudir directamente al ambulatorio, puesto que es habitual que se cuente con algún hueco reservado para urgencias.
