Las familias de niños con cáncer de Aragón exigen más horas de clase y profesores de secundaria
Los pacientes están recibiendo en sus domicilios cinco clases a la semana, de las que solo dos son presenciales. Los problemas se agravan cuando la familia reside fuera de Zaragoza.
El próximo martes, 15 de febrero, se celebra el Día Internacional del Niño con Cáncer. Aspanoa ha querido aprovechar esta fecha para reclamar al Gobierno aragonés que revise la atención educativa que reciben los niños con cáncer, ya que se encuentra en una situación "muy mejorable" desde hace varios cursos. Los equipos docentes que atienden a los menores cuando están ingresados, en el aula hospitalaria del Miguel Servet, y después en sus domicilos no cuentan con profesores de secundaria en sus plantillas, lo que dificulta impartir asignaturas de ESO y bachillerato. Además, el servicio de atención educativa domiciliaria en los hogares solo ofrece cinco clases de una hora a la semana, de las que únicamente dos son presenciales. Esta problemática no solo afecta a los menores con cáncer, sino también a todos los que sufren alguna patología grave que les obliga a estar hospitalizados y seguir tratamientos y recuperaciones largas en sus casas sin poder acudir a sus centros.
El presidente de Aspanoa, Gabriel Tirado, ha denunciado este sábado la falta de profesores de educación secundaria en ambos servicios, una medida que que vienen reclamando desde 2017, aunque también ha reconocido los "esfuerzos" que hace la Administración. "Esto está haciendo que los adolecentes con cáncer estén siendo atendidos por maestros que carecen de la especialidad necesaria para enseñar materias específicas como Biología, Inglés o Física", ha apuntado. La situación ha llegado a tal punto que en ocasiones los propios maestros han solicitado a la entidad que busque voluntarios para que les apoyen en estas materias, dado que ellos no se consideran suficientemente preparados para impartirlas.
Con lo que respecta a la atención domiciliaria, se están produciendo dos problemas más. El primero, según apunta Aspanoa en una nota de prensa, es que Educación estableció que este curso los maestros impartirían un máximo de cinco clases a la semana a cada niño y que de ellas solo serían presenciales dos y el resto telemáticas. "Es insuficiente para la mayoría de los niños -comenta Tirado-. Muchos padres nos están contando que cuando sus hijos vuelven al colegio después del tratamiento van bastante retrasados con respecto al resto de sus compañeros". En cursos anteriores, las cinco sesiones semanales de una hora, que las familias consideran muy escasas, solían ser presenciales, siempre que el estado de salud del menor lo permitía.
El problema se agrava fuera de Zaragoza
Las carencias se agravan cuando los pacientes residen fuera de la capital aragonesa, ya que hasta que los servicios provinciales de Educación aprueban que sean atendidos por un profesor en sus casas "pueden pasar hasta dos meses", lamenta Tirado. A diferencia de lo que ocurre en Zaragoza, donde hay un equipo específico de maestros de atención domiciliaria (compuesto, según Aspanoa, por cuatro maestros especializados), deben ser los servicios provinciales los que autoricen al centro educativo al que pertenece el menor un aumento de sus recursos humanos para poder atenderlo en su hogar.
Aspanoa ha lanzado esta reivindicación este sábado coincidiendo con la celebración en Zaragoza del acto institucional con motivo del Día Internacional del Niños con Cáncer. El World Trade Center ha acogido una gala en la que se ha rendido un homenaje a las doctoras Ana Carboné y Carlota Calvo, que se jubilan después de 30 años trabajando en Oncopediatría, así como a Miguel Casaus, presidente de Aspanoa entre 2005 y 2020. También se han entregado diplomas a los voluntarios que cumplían cinco años con Aspanoa. El acto ha contado con una actuación de magia a cargo de Pepín Banzo y el coro infantil Amici Musicae del Auditorio de Zaragoza ha puesto el punto final al encuentro.
Paralelamente, durante todo este sábado se va a celebrar una actividad solidaria en las piscinas del centro de deportes municipal Alberto Maestro de Zaragoza, en el que casi un centenar de personas van a nadar en la modalidad de relevos un total de 175 kilómetros contra el cáncer infantil. Se trata de la cita Brazadas Solidarias, que organiza Óscar Villanueva junto con un amplio grupo de colaboradores y voluntarios.
De cara al próximo martes, miles de aragoneses aragoneses saldrán a los patios de colegios e institutos para mostrar su apoyo a los niños con cáncer. Además, se ha organizado el 'flashmob' jotero, junto con la asociación Jotéate, que se bailará a las 19.00 en las tres capitales aragonesas. La cita es en la plaza del Pilar de Zaragoza, la de López Allué de Huesca y la del Torico de Teruel. Además, la delegación del Gobierno se iluminará en dorado -color que simboliza la lcuha contra el cáncer infantil-la noche del 14 al 15 de febrero. La Virgen del Pilar llevará el manto de Aspanoa durante todo el día.
