¿Se ve de nuevo como presidente del Congreso?

Si me pregunta si me gustaría, no tengo inconveniente en decir que sí, me encantaría. He trabajado mucho pero creo que con buen resultado. Al final de mi mandato hubo un aplauso unánime de todos los grupos, lo cual me produjo una gran satisfacción. Ahora bien, ¿qué posibilidades tengo? Pequeñas, porque primero hay que ganar las elecciones en suficientes condiciones, y en segundo lugar, Rajoy puede considerar que es bueno que siga o no.

¿Cómo va a acabar el desafío soberanista? ¿Han llegado tarde las medidas a aplicar por el Gobierno?

La contestación, aunque me gustaría que fuera otra, es que no sé cómo va a acabar el desafío soberanista, pero sí sé lo que vamos a hacer nosotros, hacerle frente y no aceptar que Cataluña no sea España. Yo no creo que lleguen tarde las medidas, sino precisamente cuando se ha producido este desafío. ¿De qué forma? Vuelvo a insistir en esto: medidas adecuadas, proporcionales, pero con toda la ley detrás. Y se irán tomando. Sí me gustaría decir, porque creo que es importante, que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se ha mostrado ante la gente dispuesto a batallar. Ha llamado a los partidos de la oposición precisamente para actuar de forma conjunta. Yo lo que pediría a todos los ciudadanos que quieren la unidad de España, voten lo que voten, no me dirijo solo a los del PP, que le abran un margen de confianza al presidente del Gobierno.

¿Cree que serán necesarias nuevas elecciones en Cataluña?

Es muy difícil elucubrar sobre un tema como este en el cual, para empezar a hablar, el Parlament hace una declaración que se salta todas las líneas rojas, pero no digo de España, también de la UE y casi de las Naciones Unidas. Rechazar toda la legislación actual de la nación y decir que no se va a acatar ninguna ley es una cosa tan insólita que te deja perplejo para hacer previsiones.

El Congreso celebra hoy (por ayer) una concentración de repulsa a los atentados de París. Se habla ya de guerra contra el Estado Islámico. ¿Lo considera así? ¿Teme una respuesta del EI también en España?

Yo diría que la manifestación de hoy (por ayer) en el Congreso tiene que ser de condolencia por lo que ha ocurrido. Pero yo insisto, la realidad exige también solidaridad con lo que pueda ocurrir con el porvenir. Nosotros formamos una Unión Europea, Francia es un país occidental como España y nosotros debemos apoyarnos. ¿Cómo? Ya veremos, probablemente con unas relaciones más intensas, que ya lo son mucho, entre los servicios secretos y las policías de los dos países, apoyo político... Tenemos que apoyar a Francia. Desde luego, yo no descarto nunca que un atentado pueda ocurrir en España.

¿Esto afectará a la política de refugiados?

Eso es lo que tienen que determinar los países. Parece indicar que algo de lo que se decía podía ocurrir, pero esto no tiene ninguna intencionalidad política. Es indudable que si hay un flujo de refugiados los terroristas intenten aprovechar eso como cualquier otra cosa. Eso no quiere decir que nosotros como países reaccionemos diciendo que como se aprovechan en algunos casos, se acabaron los refugiados, no puede ser así. Pero implica que hay que saber con quién estamos jugando la partida y que son gente muy peligrosa.

¿Ve factible una intervención de España en Siria?

No, ni creo que en estos momentos haya ese planteamiento. No se trata de eso. Sí se trata de apoyar las medidas que tomen los países aliados nuestros y que sepan que tienen en España un aliado firme y dispuesto a apoyarles.