El número de muertos por el derrumbe parcial de un edificio tras un ataque a Bélgorod, capital de la homónima región rusa fronteriza con Ucrania, ascendió a 15, informó este lunes el Ministerio de Situaciones de Emergencia, que dio por terminadas las labores de rescate.

"Los trabajos de rescate y remoción de escombros han concluido. Se consiguió salvar a 17 personas. De debajo de los escombros fueron recuperados 15 cadáveres", señaló Emergencia en un comunicado.

Más de una veintena de personas se encuentran hospitalizadas a raíz del suceso, según el gobernador de Bélgorod, Viacheslav Gladkov, quien informó también de otras tres muertes como consecuencia de ataques de la artillería ucraniana.

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Este domingo, el Ministerio de Defensa de Rusia informó del derribo de dos misiles Tochka-U ucranianos y otros dos drones sobre la región de Bélgorod, la más afectada por ataques enemigos desde el inicio de la guerra.

Más tarde, los militares rusos emitieron un nuevo comunicado en el que elevaron a seis el número de misiles Tochka-U derribados en Bélgorod y afirmaron que los fragmentos de uno de los proyectiles "dañaron un edificio de viviendas en la ciudad".

Mientras, el Comité de Instrucción ruso informó a su vez de la apertura de un caso penal por terrorismo a raíz de los ataques contra Bélgorod.

La portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia, María Zajárova, responsabilizó del bombardeo al presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, y sus "patrocinadores occidentales".

El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, dijo a los medios que el líder ruso, Vladímir Putin, había sido informado de lo ocurrido en Bélgorod "como consecuencia de un brutal ataque con misiles del régimen de Kiev" y había impartido las "instrucciones correspondientes".