“Apartamento nuevo con un dormitorio y salón, 54.000 euros”. “Dúplex de 105 metros cuadrados, con tres dormitorios, 146.000”. Parecen buenas ofertas, pero cuesta encontrar comprador. La asociación de vecinos del Arrabal está impulsando -en colaboración con Zaragoza Vivienda- la creación de una cooperativa para la construcción de 24 viviendas protegidas en el casco histórico del Arrabal, a 5 minutos del Puente de Piedra.

“Pensábamos que iba a ser un éxito y que se iba a llenar enseguida, pero no ha sido así. De momento no hay muchos interesados y sobran pisos. Algunos aún tienen miedo de venir a esta zona y piensan que es un barrio degradado. Y la crisis está afectando a muchos posibles compradores, que no pueden asumir ahora los gastos o no consiguen financiación de los bancos”, afirma Rafael Tejedor, presidente de la asociación de vecinos del Arrabal.

El proyecto consiste en la construcción de 24 pisos protegidos (de uno, dos y tres dormitorios) en cuatro solares del casco histórico del Arrabal, en las calles Horno y Manuel Lacruz. De momento hay apuntadas 16 personas. Para poder optar a estas viviendas, los interesados deben estar inscritos en el Toc-Toc, el registro de vivienda protegida del Gobierno de Aragón.

La asociación de vecinos está recogiendo las solicitudes hasta mediados de noviembre. Después se realizará un sorteo para que cada inscrito elija la vivienda que quiere. Luego hay que constituir la cooperativa. La sociedad municipal Zaragoza Vivienda (propietaria de los solares) colaborará con los vecinos en todo el proceso. Ya tiene los proyectos hechos y las licencias de construcción. Si se cumplen los plazos, los pisos pueden estar terminados a finales de 2013.

La asociación del Arrabal impulsa este proyecto para facilitar viviendas a precio asequible para vecinos del barrio y gente de fuera, y para revitalizar el casco histórico. “Queremos que los vecinos no tengan que marcharse a vivir fuera, porque aquí no había VPO. Y queremos que venga gente nueva al barrio”, afirma Rafael Tejedor.

Dificultades para las promociones de VPO

La crisis ha paralizado el mercado de la vivienda libre, pero también está afectando mucho a los pisos protegidos. Hasta hace dos o tres años, cuando salía una nueva promoción de VPO, el número de solicitantes multiplicaba por tres o por cuatro al número de pisos. Ahora hay que ir a buscar a los posibles compradores o inquilinos.

“El Ayuntamiento tiene problemas para cubrir los pisos de VPO. Hay muchas renuncias de gente que se ha quedado en el paro o que no consigue financiación de los bancos”, afirman fuentes municipales. En algunos casos, como ha ocurrido en promociones en San Pablo u Oliver, hay gente que renuncia porque no le gustan estos barrios.

En las últimas dos promociones municipales de VPO (en Las Armas-Casta Álvarez y en Torrero), el Ayuntamiento ha tenido que recurrir al procedimiento de adjudicación directa (las asociaciones vecinales buscan directamente a gente interesada), porque inicialmente no había gente suficiente en la lista del Toc-Toc.

En Las Armas se han construido 82 viviendas de alquiler con opción a compra, dentro del plan especial que incluye locales comerciales y un centro cultural. Inicialmente solo se apuntaron 32 personas. Después se abrió un nuevo proceso de adjudicación directa y aumentó el número de solicitudes. Finalmente, para 50 pisos vacantes (dos para disminuidos físicos) se presentaron 154 interesados. El sorteo ya se ha realizado y los inquilinos irán a vivir antes de final de año. Un piso de 70 metros cuadrados con tres dormitorios cuesta 406 euros al mes.

En Torrero se han construido 92 viviendas protegidas de alquiler con opción a compra en los terrenos de la antigua cárcel. Al principio solo hubo 9 interesados y también se ha recurrido al procedimiento de adjudicación directa. Ahora hay 94 solicitudes para 83 pisos vacantes (tres para discapacitados). El sorteo se realizará en breve. El alquiler de un piso de 90 metros cuadrados, con garaje y trastero cuesta 684 euros.