El Ayuntamiento de Terrer reclama una limpieza del cauce del río Jalón y de los barrancos que desembocan en él a su paso por este término municipal. Denuncian que desde hace años se viene advirtiendo a la Confederación Hidrográfica del Ebro del "peligro que representa el total abandono de estos cauces naturales" y temen que en caso de una crecida, al estar obstruidos, pudieran producirse daños en esta localidad de la comarca Comunidad de Calatayud.

El alcalde de este municipio, Tomás Escolano (PP), explica que hace un tiempo ya se presentó al organismo de cuenca un informe exponiendo la necesidad de limpiarlos y con fotografías que ilustraban el deterioro, pero no se ha acometido trabajo alguno y existe inquietud entre la población.

"Debajo del puente del río, en el camino de la estación, se ha creado una isla y el cauce está prácticamente ciego, pero no es solo en esta zona. Hay distintos tramos que da verdadera pena ver cómo están", insistió el primer edil. También los barrancos acumulan vegetación y han ido progresivamente deteriorándose "cualquier día nos puede pasar algo y la verdad es que nadie nos hace caso", alertó.

Hace un tiempo se acometió una limpieza en el cauce del Jalón entre Ateca y Terrer, pero según Escolano, a su paso por el casco urbano de su localidad "nadie ha hecho nada".

Los barrancos llamados del Lugar, otro más largo, el de la Cañada, que cruza por debajo de la autovía de Madrid (A2) y viene de La Vilueña, están en muy mal estado. "Este está ciego completamente y el día que baje agua por él se anegarán unas cuantas hectáreas de tierra", añadió el alcalde terreño.

Intervención en los barrancos

También se solicita la intervención en el barranco de la Alóndiga. "Del río no se puede tocar nada, ni un chopo que se cae, pero cada vez va a peor, y es una pena ver cómo está", insiste el alcalde, que comenta la preocupación de los vecinos. Según explica, "la gente ya habla de hacer una manifestación ante las puertas de la confederación".

A finales del año pasado representantes municipales del Consistorio terreño mantuvieron una reunión con el presidente de la Confederación Hidrográfica del Ebro, y según indican, salieron con "muy buenas palabras", pero sin el compromiso que buscaban.

Estos dos cauces discurren entre el barrio conocido como la Azucarera, el de la Estación y por el resto del conjunto urbano de Terrer. El problema, advierten, no solo es cómo están, sino que su estado va empeorando, y que en el caso de que se produjera una avenida extraordinaria, al pasar por una zona habitada, los daños también podrían ser personales.