El Ayuntamiento de Zaragoza ha superado un nuevo trámite para la aprobación de los impuestos y tasas municipales para 2012, con un incremento medio previsto del 5 % que permitirá ingresar en las arcas del Consistorio una cantidad suplementaria de 16 millones de euros.

El borrador ha sido aprobado por la Comisión de Pleno de Presidencia, Economía y Hacienda del Consistorio zaragozano, con los votos a favor de PSOE, IU y CHA, y la oposición del grupo municipal del PP, que ha rechazado el proyecto al entender que perjudicará a las economías más débiles de la ciudad.

Al término de la comisión, el vicealcalde de Zaragoza, Fernando Gimeno, ha explicado que el incremento acordado, dos puntos por encima de las previsiones de aumento del IPC, permitirá elaborar unos presupuestos para 2012 en los que se priorizarán, según el edil, los gastos sociales.

Gimeno ha insistido en que las familias zaragozanas no percibirán en sus economías el incremento, ya que el impacto máximo será de 3 euros más al mes, y ha subrayado que la subida afectará más a las grandes industrias con mayor capacidad económica.

El vicealcalde ha añadido que durante la comisión había propuesto al PP la posibilidad de negociar una disminución de los impuestos si estaban dispuestos a su vez a aumentar las tasas municipales a fin de ajustarlas a los costes reales de los servicios prestados, aunque ha asegurado no ser "optimista" respecto a un acuerdo.

Ha explicado que una disminución de los ingresos por debajo de los 16 millones previstos para recaudar tendría un efecto "muy negativo" en los presupuestos de 2012.

La oposición

Por su parte, el concejal del PP Jorge Azcón ha lamentado el uso del "rodillo" hecho por el equipo de gobierno local para rechazar la totalidad de enmiendas presentadas a un proyecto de ordenanzas que, en su opinión, "machaca" los bolsillos de los zaragozanos con un incremento que duplica la previsión de aumento del IPC.

Azcón ha responsabilizado al alcalde, Juan Alberto Belloch, de incumplir su propuesta en campaña electoral de no incrementar la presión fiscal, y de plegarse a los planteamientos de IU y CHA con el fin de "mantener el sillón".

El edil ha mostrado su disposición, sin embargo, a negociar "mejoras" en las ordenanzas fiscales "para no machacar a los ciudadanos en la situación de crisis que estamos viviendo".

El portavoz de IU, José Manuel Alonso, ha calificado de "irresponsable" la posición de los concejales del PP al entender que sus 89 propuestas, un tercio de las cuales fueron desestimadas previamente por defectos formales, no plantean un debate "serio" sobre las ordenanzas y pretendían convertir el ayuntamiento "en un teatro".

Alonso ha explicado que las enmiendas defendidas por el Partido Popular eran "abiertamente antisociales" y no contenían ninguna propuesta "seria".

El concejal de CHA Carmelo Asensio ha comentado a su vez que el acuerdo alcanzado permitirá conseguir ingresos para el consistorio, "pero repartiendo la carga fiscal de manera que no seamos todos los ciudadanos por igual los que soportemos el incremento".  El edil también ha dirigido sus críticas a los concejales populares, a los que ha responsabilizado de proponer enmiendas que "van en sentido opuesto" a los planteamientos del resto de grupos de la corporación.