INVESTIGACIÓN

La Universidad lidera un proyecto para convertirse en referencia de la nanociencia

Financiado con 2,3 millones de euros de fondos europeos, el proyecto busca unificar esfuerzos, generar sinergias y fomentar una cooperación trasnacional que permita a esta región europea competir en igualdad de condiciones con el norte europeo, actual referente en estos ámbitos.

El director del Instituto de Nanociencia de Aragón, Ricardo Ibarra, es el responsable del proyecto TRAIN2 que pretende convertir el sudoeste europeo en un foco de excelencia en nanociencia y nanotecnología que permita la investigación conjunta de científicos españoles y franceses y la atracción de empresas.


Financiado con 2,3 millones de euros de fondos europeos, el proyecto busca unificar esfuerzos, generar sinergias y fomentar una cooperación trasnacional que permita a esta región europea competir en igualdad de condiciones con el norte europeo, actual referente en estos ámbitos.


El consorcio que dirige Ibarra está formado por doce centros de investigación de España, Francia y Portugal, una región que, ha explicado en rueda de prensa, cuenta con óptimas infraestructuras científico-técnicas pero que no están coordinadas.

Las mejores infraestructuras

Según Ibarra, en Aragón se disponen de las "mejores infraestructuras" para la observación de materia al máximo nivel de detalle y con capacidad para elaborar la materia a nivel de átomos. Por eso, uno de los retos del proyecto es optimizar el uso de esas infraestructuras mediante la creación de redes trasnacionales que permitan a los investigadores españoles realizar su labor en Francia y viceversa.


Los socios participantes de Cataluña, Aragón, Valencia, País Vasco, Portugal, Midi Pyrenees, Languedoc-Rousillon y Aquitania constituyen una referencia a nivel mundial por su excelencia científica e infraestructuras singulares, pero sin embargo no existe una proyección de los mismos compartiendo un espacio geográfico y económico social.


Por ello, TRAIN2 pretende configurar redes estables de infraestructuras científico-técnicas que permitan mejorar la competitividad científica mediante un uso compartido y puedan dar servicio especializado al tejido empresarial y abordar proyectos concretos de investigación en nanociencia mediante la configuración de grupos de investigación trasnacionales.


Además, se establecerán programas de formación científico-técnica a nivel de máster y doctorado para formar personal altamente cualifificado en las tecnologías avanzadas relacionadas con este campo e identificar el consorcio como una referencia que actúe de "cluster" catalizador en el establecimiento de sinergias en nanociencia y nanotecnología en esta región.


La investigación se centrará en cinco áreas: el nanomagnetismo, que investiga nuevos dispositivos basados en nuevos materiales que se fabrican en condiciones muy especiales como los sensores de los discos duros o cabezas lectoras, y los nanosistemas moleculares, que utilizan las infraestructuras (microscopía) potentes con que cuenta el consorcio para producir moléculas artificiales.Diseño de nuevos materiales

La tercera rama es la nanobiociencia orientada al diseño de nuevos materiales con nuevos funcionamientos para su aplicación en medicina y la mejora de las técnicas de diagnósticos para avanzar en terapias menos agresivas.


En la nanocatálisis se utilizarán nuevos nanometales para tener una incidencia en determinados tipos de reacciones como por ejemplo reducir la contaminación de los vehículos y en el diseño de nanosistemas se buscará aprovechar la potencia de la nanofabicación para diseñar nuevos sensores para su aplicación en, por ejemplo, redes wifi.