PATRIMONIO

La Casa Solans se podrá visitar

El Ayuntamiento y la ONU están negociando un plan de visitas para este edificio modernista, sede de la Oficina del Agua, como piden los vecinos del entorno desde hace tiempo. Sus responsables quieren que se conozca su trabajo.

Vista del exterior de la Casa Solans, en la avenida de Cataluña.
La Casa Solans se podrá visitar
P.F.

Una de las joyas del patrimonio zaragozano apenas la disfrutan media docena de personas. Es la Casa Solans, sede de la Oficina de Naciones Unidas de apoyo al Decenio del Agua 2005-2015, donde trabajan seis personas. Apenas ha habido alguna visita puntual para el público desde que se instaló la Oficina, en septiembre de 2007. Su trabajo es muy desconocido por los ciudadanos. Pero esto parece que va a cambiar: la Oficina y su trabajo van a abrirse a la ciudad.


El Ayuntamiento de Zaragoza -que rehabilitó el edificio, con un coste de cerca de un millón de euros, y después lo cedió a la ONU- y Naciones Unidas están negociando un plan de visitas guiadas, como demandan los vecinos desde hace tiempo. Los responsables de esta Oficina están deseando mostrar su trabajo y el edificio.


La Casa Solans es un edificio modernista, construido en 1921 como villa de recreo para el industrial Juan Solans. El edificio quedó abandonado en los años 60 y años después, tras ser declarado en ruinas, el Ayuntamiento se hizo con la propiedad. La rehabilitación, costosa y compleja, terminó en junio de 2005.


“Estamos muy contentos de estar aquí. El edificio es muy bonito y muy apropiado para la función que realizamos. Tenemos estatus de sede diplomática. Aquí se realizan reuniones y trabajamos en distintos proyectos de comunicación y sensibilización. Queremos que los zaragozanos se sientan orgullosos de esta oficina y de nuestro trabajo para facilitar el acceso al agua en el mundo”, afirma la directora de la Oficina de apoyo al Decenio del Agua, Josefina Maestu.


Las asociaciones de vecinos del Rabal y los grupos municipales han solicitado en varias ocasiones que se permitan las visitas a la Casa Solans, declarada Bien de Interés Cultural. “Entendemos que hay un interés por visitar el edificio. Estamos diseñando un plan con Turismo del Ayuntamiento para permitir visitas organizadas. Queremos que estas visitas sirvan también para que los ciudadanos conozcan nuestra actividad”, subraya Josefina Maestu.


Desde el Ayuntamiento explican que “hay buena voluntad” por ambas partes, pero que aún se está negociando con Naciones Unidas. Al ser una sede diplomática, las medidas de seguridad son muy estrictas y la gestión de los permisos es compleja.


De momento, ya se ha dado algún pequeño paso para esta apertura al público. Desde el pasado 25 de octubre, la Oficina organiza en el patio una exposición itinerante de carteles gráficos. La muestra, con el título de “El agua es vida”, se puede visitar de lunes a viernes, de 10.00 a 17.00, hasta el 25 de noviembre. Se accede libremente por la puerta del patio. Es la primera vez que la Casa Solans se utiliza como espacio expositivo, aunque sea solo en la parte exterior. En el futuro, la directora de la Oficina también contempla organizar actividades en el patio con escolares.


“Siempre hemos pedido que la Oficina del Agua se traslade a la Expo y que la Casa Solans tenga un uso ciudadano, por ejemplo como sala de exposiciones para el barrio. Mientras, deberían permitir las visitas guiadas porque se trata de un Bien de Interés Cultural”, afirma Rafael Tejedor, presidente de la asociación de vecinos del Arrabal. “Llevábamos años esperando la rehabilitación del edificio y ahora no lo podemos disfrutar. Hemos pedido varias veces que se abra al público. Además, Zaragoza no ha sabido explotar la presencia de la Oficina de la ONU, no hemos visto los beneficios de su presencia”, señala Raúl Gascón, presidente de la asociación de vecinos del barrio Jesús.

¿Qué se hace en la Casa Solans?

El trabajo de la Oficina del Agua no es muy conocido por el público en general. “Nosotros no trabajamos para Zaragoza, trabajamos para el mundo. Somos una oficina de información y promoción de los temas del agua. Colaboramos con las distintas agencias de Naciones Unidas. Editamos informes y organizamos cada año la Conferencia de Zaragoza preparatoria de la del Día Mundial del Agua”, explica la directora. En octubre, han celebrado la conferencia “El agua en la economía verde en la práctica: hacia Río+20”, con la presencia de expertos internacionales.


“La Expo puso a Zaragoza en el mapa del mundo, y la Oficina lo está manteniendo”, asegura Josefina Maestu, que dirige un equipo de seis personas y cuatro becarios. La continuidad de la Oficina, después de 2015, depende de la renovación del convenio entre España y Naciones Unidas.