ZARAGOZA

Ingresa en prisión sin fianza el marido de la joven acuchillada en Tenerías

La autopsia revela que las puñaladas del cuello no fueron mortales, pero sí lo fue una dirigida al corazón.

Esta foto de la pareja fue tomada en agosto de 2007.
Ingresa en prisión sin fianza el marido de la joven acuchillada en Tenerías
HERALDO.ES

El asesino confeso de la joven acuchillada el pasado miércoles en el barrio de Las Tenerías ingresó ayer en la cárcel de Zuera. Lo hizo tras comparecer ante el titular del Juzgado de Violencia Doméstica número 2 de Zaragoza, quien decretó prisión provisional comunicada pero sin fianza para Miguel I., de 51 años. No ha trascendido si el homicida llegó a contestar a las preguntas del juez, pero los escasos 20 minutos que estuvo en su despacho hacen pensar que prefirió guardar silencio. Ya lo hizo cuando le interrogó el Grupo de Homicidios en la Jefatura Superior de Policía. Por ello, hay que remitirse a la llamada que el propio hombre hizo al 091 después de cometer el crimen, en la que reconocía ser el responsable de la muerte de su mujer, Tatiana Radionova, de 29 años.


«Velando por los intereses de su cliente», Juan Manuel Lestón, abogado del presunto asesino, prefirió también no aclarar si este llegó a declarar ante el juez. Tampoco ofreció muchos detalles sobre el auto de prisión, y se limitó a confirmar que la Policía ha instruido el caso como «homicidio doloso». «Es difícil saber cómo se encuentra. Se encuentra, sin más. Durante su comparecencia, estaba mitad presente, mitad ausente», explicó el abogado, refiriéndose al estado anímico de Miguel I. «No estaba agresivo ni derrumbado. Estaba simplemente normal», puntualizó.


Aunque no se ha decretado el secreto de sumario, el abogado de la defensa -que conocía a la pareja desde hace ya algún tiempo- evitó también referirse a las circunstancias de la muerte de Tatiana Radionova. El informe preliminar de la autopsia ya ha sido entregado al juez, aunque habrá que esperar todavía algunas semanas para que los resultados definitivos se incorporen a las diligencias. En cualquier caso, y según ha podido saber este periódico, dicho informe descarta que la causa directa del fallecimiento de la joven de nacionalidad rusa -aunque nacida en Kazajistán- fueran las cuchilladas que presentaba en el cuello. El cuerpo de la víctima presentaba diferentes cortes y lesiones, pero la más grave fue la herida de arma blanca que le alcanzó el corazón. De hecho, esta fue la que terminó provocando su muerte.


Aunque tampoco ha trascendido de forma oficial cómo se asestó esa puñalada, parece que lo más probable es que la joven fuera atacada de frente. En este sentido, los especialistas recuerdan que resulta más sencillo alcanzar este órgano vital por delante que por detrás.


En cualquier caso, resulta evidente que la lesión fue mortal de necesidad, ya que cuando llegaron las ambulancias al número 6 de la calle de Pascual Albero, donde residía la pareja, nada pudo hacerse ya por la vida de la apuñalada.


Ella iba a marcharse de casa


A medida que pasan los días, comienzan a salir a la luz las desavenencias que existían entre la pareja. Enfrentamientos que el propio asesino confeso reconoció a la Policía cuando llamó por teléfono para informar del crimen. La convivencia se había enrarecido hasta tal punto que la joven había decidido abandonar a su marido. De hecho, fuentes de su entorno más próximo han asegurado que había buscado un piso de alquiler para irse a vivir con su madre.


Las relaciones entre el presunto homicida y su suegra tampoco eran buenas, ya que el primero reprochaba a esta las dificultades que estaba atravesando su matrimonio. La mujer, de unos 70 años, pasaba largas temporadas en el piso de la calle de Pascual Albero, donde su nombre figura incluso todavía en el buzón.


Tatiana y su madre no tenían más familia -al margen de la de su marido y yerno, respectivamente- en la capital aragonesa, de ahí que la segunda pueda plantearse ahora la posibilidad de regresar a su país de origen.