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Un paseo por el pasado medieval del Bajo Aragón-Caspe

Castillos, iglesias y restos del trazado urbano son los vestigios de la Edad Media que quedan en esta comarca marcada por las órdenes de San Juan, del Temple y Calatrava.

Foto del castillo de Caspe
Foto del castillo de Caspe
Comarca Bajo Aragón-Caspe

Recrear el pasado medieval de la comarca del Bajo Aragón-Caspe es posible recorriendo sus castillos, iglesias y restos del trazado urbano que pervive de aquella época. La entidad supramunicipal propone una ruta por estos vestigios para conocer más sobre los avatares del medievo en estas tierras al este de la provincia de Zaragoza. Este capítulo de la historia de Caspe y alrededores está ligado a los señoríos y a las tres órdenes militares (la del San Juan, la de los Calatravos y la del Temple) que controlaron buena parte de ellos.

En los seis municipios que forman parte de esta comarca hay restos medievales que dan idea de cómo transcurrieron aquellos años en la zona. La ruta comienza en Caspe, cuyos principales enclaves de esta época son el castillo del Compromiso y la colegiata de Santa María la Mayor. La orden de San Juan recibió la fortaleza musulmana de manos de Alfonso II y sobre ella se levantó el actual castillo, que data de los siglos XII y XV. En un primer momento recibió el nombre de Bailía pero un gran hito hizo se trascendiera como el castillo del Compromiso. Y es que en uno de sus salones se reunieron los nueve compromisarios que, en 1412, eligieron al sucesor de la Corona de Aragón. Hace diez años finalizaron las obras de rehabilitación y se puede visitar por 2.4 euros de martes a sábado a las 12.30 y los domingos a las 11.30.

La colegiata de Santa María la Mayor es el edificio más emblemático de la localidad y también tiene su origen en el medievo. Es de estilo gótico y fue declarada Monumento Nacional en 1908. Al templo se puede acceder de martes a sábado a las 11.45 y los domingos a las 10.45 en una visita guiada de 45 minutos de duración que cuesta 2,40 euros.

Estos dos enclaves y otros como la ermita de San Indalecio, el callizo de la Infanzonía, donde las mujeres daban a luz en la Edad Media para que sus hijos fueran infanzones, se pueden conocer en una ruta medieval guiada, que se puede contratar por 4.8 euros. Se ofrece de martes a sábado a las 11.00 y los domingos a las 10.00 y dura una hora y media, con salida desde la oficina de Turismo.

La ruta continúa en Maella, donde de la época medieval destaca el castillo-palacio. Se construyó en lo alto de un loma y solo se conserva su cara norte, con un extenso tramo de muralla. El resto está en estado de ruina pero las bodegas se restauraron y se pueden visitar los fines de semana, consultando el horario en el Ayuntamiento. Otros restos de la Edad Media en Maella son la lonja, que se encuentra en el centro del pueblo, un templete gótico a las afueras y la nave central de la iglesia de San Esteban.

Fabara, donde la pared del castillo se aprovechó como casa consistorial

La siguiente parada en esta ruta por el pasado medieval del Bajo Aragón-Caspe es Fabara. En aquella época, este señorío tenía un castillo que, curiosamente, ahora se ubica en la plaza principal del pueblo. En realidad solo es una fachada que se aprovechó para construir el antiguo ayuntamiento y algunas casas adosadas a él. También se conserva el arco de una puerta.

Lo que sí se conserva en buen estado y todavía luce esplendorosa es la iglesia de San Juan Bautista. El templo es de estilo gótico mediterráneo y está rematado con almenas ya que formaba parte de un conjunto amurallado como la típica iglesias-castillo de la Edad Media. Solo hay que verlo a lo lejos para percatarse de la apariencia fortificada de este templo religioso propio de un territorio fronterizo como es Fabara. Aunque la construcción tal y como se conoce hoy data de finales del XIV, se conoce que hubo una primera fase en el siglo XIII de la que pervive la capilla de la Asunción.

Castillo de la Encomienda en Nonaspe
Castillo de la Encomienda en Nonaspe
Comarca Bajo Aragón-Caspe

En Nonaspe, siguiente destino, el antiguo castillo medieval se emplea actualmente como Ayuntamiento. La construcción, tal y como se muestra hoy, es del siglo XV. Se sitúa en un alto sobre el río Matarraña, a partir del que creció la villa. Hace 30 años, el castillo de la Encomienda se rehabilitó para usarse como casa consistorial y salón de actos. De su interior, destaca el patio de armas, convertido en una gran plaza que asoma al río. En la localidad se encuentra también la iglesia de San Bartolomé que, además de ser medieval, es la más antigua de la comarca. Es de estilo gótico y su origen se remonta al año 1300.

De la iglesia de San Juan Bautista, en Chiprana, destaca su decoración mudéjar y también la influencia de la orden del Císter, por su cercanía con el Monasterio de Rueda. El templo es la máxima representación medieval de la localidad y, pese a su actual apariencia con una gran fachada gótica-neoclásica, es una de las construcciones más antiguas del Bajo Aragón.

La última parada de la ruta es Fayón, localidad que al quedar inundada por las aguas del Ebro apenas conserva restos de la época medieval. Tan solo han trascendido las ruinas de un pequeño castillo del siglo XIV. Es de planta irregular ya que se construyó sobre una prolongación rocosa que se eleva en vertical sobre el pueblo y el río. Los Moncada fueron quienes lo mandaron construir, entre el XII y el XIV, con la finalidad de vigilar el tránsito de embarcaciones por el Ebro hacia la vecina Cataluña. Se sabe que a dicha construcción se accedía desde el antiguo pueblo, por un camino estrecho excavado en la roca.

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