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Apertura de los albergues del Camino de Santiago: "Después de casi dos años de sequía, este va a estar bastante animado"

"Los aragoneses no acaban de creerse el potencial que tiene el camino francés", señala Miguel Pérez, coordinador del recién constituido Camino Francés Federación.

Un peregrino avanza por el Camino de Santiago que pasa por la comarca de la Jacetania
Un peregrino avanza por el Camino de Santiago que pasa por la comarca de la Jacetania, en una imagen de archivo.
Javier Gazapo

A partir de este recién estrenado mes de marzo, los albergues de la parte aragonesa del Camino de Santiago van a ir abriendo de forma continuada para ofrecer al peregrino ese lugar en el que pernoctar y poder compartir sus vivencias con otros huéspedes.

"Cuando alguien dice que tiene también un hotel o un hostal no es lo mismo. Un peregrino camina en soledad durante el día y cuando llega la tarde se reúne en los albergues e intercambia experiencias con otros. Todo eso forma parte de la identidad del Camino", apunta Miguel Pérez, coordinador del recién constituido Camino Francés Federación -CFF- (del que forman parte las asociaciones del Camino de Santiago de Zaragoza y Jaca, junto a otras de Navarra, La Rioja, Castilla y León y Galicia).

Uno de los albergues aragoneses que está abierto todo el año es el de Ruesta, con capacidad de 65 camas y que se gestiona en cooperativa. En enero y febrero tan solo acogieron a siete peregrinos y este lunes y martes, a dos procedentes de Cataluña. "El problema es que muchos están cerrados y tienen que ir a hostales. La diferencia de precios es del doble: de 12 euros que cuesta dormir aquí a 40-45. Además, en unos 40 kilómetros hay cuatro albergues. Uno de los peregrinos catalanes se quejaba de que en dos etapas del Camino se había tenido que alojar en un hostal; eso lleva a que esperen a su apertura en primavera", explica Martín Cristóbal, uno de los gestores de este albergue.

Asimismo, Cristóbal comenta que otra de las quejas que les trasladan es la falta de limpieza y conservación de los caminos. "Todos vienen con arañazos de zarzas. A ello se une que está un poco desangelado a nivel de servicios", añade Cristóbal, que señala que el 50% de las estancias es de peregrinos y el otro 50%, de turistas que se acercan los fines de semana atraídos por la riqueza del entorno natural. "Hay 130 variedades de pájaros y aquí se encuentra una orquídea silvestre muy especial", detalla.

Las previsiones para este año (que es Jacobeo) son buenas, aunque en reservas aún no lo están viendo porque, tal y como subraya, el peregrino suele llamar con una antelación de una semana o dos días antes.

De izquierda a derecha, Daniel Jiménez, Luna del Barrio y Martín Cristóbal, que gestionan el Albergue de Ruesta, dentro del camino francés.
De izquierda a derecha, Daniel Jiménez, Luna del Barrio y Martín Cristóbal, que gestionan el Albergue de Ruesta (detrás), dentro del camino francés.
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Por su parte, el presidente de la Asociación de Amigos del Camino de Santiago de Zaragoza, José María Viladés, dice que ya están empezando a recibir a peregrinos que se vienen a informar y a pedir la credencial. "Después de prácticamente dos años de sequía, este va a estar bastante animado. La inmensa mayoría son aragoneses y hay muchos más que empiezan el Camino desde Zaragoza que desde el Somport ", avanza.

Viladés señala que el primer peregrino que entró en España lo hizo por Aragón (por el Somport), en cambio ahora lo hacen "todos" por Roncesvalles (Navarra). En este punto, reclama a las administraciones de la Comunidad que miren lo que hacen las instituciones públicas de regiones vecinas como esa o Castilla y León. "Ayudan a señalizar los caminos y aportan presupuestos, es decir, se actúa. Ahí se toman el Camino de Santiago en serio los 365 días del año; en Aragón no. Se acuerdan siempre para los años santos. Sin embargo, últimamente parece que las administraciones se mueven algo más porque el Camino está como de moda", asegura.

"En Navarra se toman el Camino de Santiago en serio los 365 días del año; en Aragón no"

Además, observa que la parte espiritual del camino (como es la hospitalidad, el ayudar al peregrino) ha pasado a segundo plano. "Se le está poniendo la etiqueta de camino turístico y está perdiendo sus valores y esencias. En el Camino tiene que convivir todo, pero lo que no se puede hacer es olvidar los principios para que prevalezcan otros, que son contrarios al origen de lo que es el sentido del mismo", resalta Vildés, que recuerda que uno de los objetivos del Camino Francés Federación es defender "el primer camino". "Todos se merecen todos los respetos, pero el camino francés se está olvidando".

"Una de las marcas internacionales más importantes"

Según datos de Miguel Pérez, en 2019 entraron por Roncesvalles más de 70.000 peregrinos frente a los 2.000 que lo hicieron por Canfranc. "Los aragoneses no acaban de creerse el potencial que tiene el camino francés (declarado bien de interés cultural). Tiene un nivel de crecimiento importantísimo siempre y cuando esa Comunidad se lo crea. Debe de estar orgulloso de tener ese camino internacional que nos une universalmente y, con ello, incentivar y provocar a las instituciones para que actúen en consecuencia. El Camino de Santiago es una de las marcas internacionales más relevantes que tiene ahora mismo España con diferencia", asegura el coordinador del CFF, que reconoce que en los últimos tiempos desde las instituciones aragonesas se están haciendo "inversiones importantes" como "las pasarelas en la zona del Somport". 

"Hay que generar infraestructura adecuada para que el peregrino vaya andando, que es una manera maravillosa de viajar. Y sabemos que cuanto mejor le va al camino francés, mejor le empieza a ir al resto de caminos"

El también miembro de la Junta Directiva del Camino Francés Federación destaca el objetivo que persiguen de mantener abiertos los albergues de cara a que los peregrinos puedan hacer el camino. En este punto resalta el "esfuerzo" que hizo el Ayuntamiento de Canfrac para abrir uno en 2021. "Nos sorprendió la cantidad de peregrinos que tuvo sin apenas publicidad. Eso significa que hay deseo de hacer el Camino por Aragón. Hay que generar infraestructura adecuada para que el peregrino vaya andando, que es una manera maravillosa de viajar. Y sabemos (porque lo tenemos constatado en las estadísticas) que cuanto mejor le va al camino francés, mejor le empieza a ir al resto de caminos", sostiene.

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