aragón es extraordinario
Pasarelas de Montfalcó: en serio, prueba y cuéntalo
Situadas en el municipio de Viacamp y Litera, junto al embalse de Canelles que separa Aragón de Cataluña en la Alta Ribagorza, constituyen el ejemplo aragonés más impresionante de esta modalidad turística
Hace unos años fueron imagen predilecta de Turismo de Aragón. El boca a boca funcionó de maravilla, hasta el punto del llenazo en muchos momentos del año. Ni siquiera la pandemia bajó la fiebre por las maravillosas pasarelas de Montfalcó (pertenecientes al municipio ribagorzano de Viacamp y Litera, próximo a Benabarre y Graus) y el recorrido por el congosto de Montrebei en el embalse de Canelles, frontera entre Aragón y Cataluña. La razón es sencilla: son maravillosas, en la forma y en el fondo. La excursión desde el lado aragonés, sin ser un paseo por la pradera, no es muy compleja ni exigente en cuanto a desnivel global si se hace desde el arranque de la ruta, en el albergue Casa Batllé de Montfalcó.
Cristian Reguera, técnico del Ayuntamiento de Viacamp y Litera, es un entusiasta genuino del paseo, que hace con gusto por trabajo y también por placer. "Las posibilidades de este enclave son inmensas. Se aprecia desde Aragón, y también por parte de Cataluña; los barceloneses se hacen sus dos horas y media en bus para venir en el día, hacer el congosto y en el caso de los más animados, las pasarelas por el lado más duro; se dan un baño y vuelven, andando o en Kayak hasta La Masieta, junto al puente de Montañana, aunque en estos últimos meses la ruta del lado catalán ha estado cerrada. Desde el albergue de Montfalcó el camino es sobre todo de bajada. También llegan muchos extranjeros".
Desde la oficina de turismo de Viacamp hay una pista rodada de media horita hasta el albergue, de la cual surgen senderos hacia varios pueblos abandonados como Montgai, Fet o Finestras. No obstante, la mayoría van directos a las pasarelas. "Son accesibles para todos los públicos, naturalmente con un mínimo de fondo físico, como cualquier entorno de este tipo. Para quienes tengan un vértigo acusado, obviamente, también puede resultar duro, aunque la seguridad es muy estricta, especialmente en los tramos más complejos". Además del albergue, también están llegando cada vez más caravanas al área de información turística de Viacamp, donde está el Restaurante Montsec de L’Estall, con una amplitud de carta sorprendente y bien rematada.
Subir por la pared
¿Qué decir de los dos tramos de pasarelas pegados a la roca, en vertiginoso zigzag? 98 escalones hay en una, 115 en la otra. "Es complicado contarlos –avisa Cristian– aunque hemos hecho la tarea para dar el dato a los visitantes; el estímulo visual que tienes alrededor es demasiado poderoso para contar".
Una buena idea si se quiere hacer todo el recorrido de las pasarelas a pie es dejar el coche en Viacamp, junto al restaurante Montsec de L’Estall. Ahí se puede coger un taxi al Albergue de Montfalcó, caminar, regresar por el agua desde Segué al embarcadero de Montfalcó y tomar ahí el taxi reservado.
El regreso en catamarán
Víctor, de la firma Montrebei Explora, gobierna esta cómoda embarcación desde el puente de Segué en dirección al embarcadero de Montfalcó, en un viaje que regala impresionantes vistas y sensaciones. Allá se puede recoger el vehículo propio si se ha partido de allá, o puede reservarse el servicio de taxi. Antes de volver a Viacamp se puede optar por un alto reparador en el camino en el propio albergue Casa Batlle de Montfalcó, donde hay terraza, tapas frías y calientes e incluso opción de un menú simple para los excursionistas.
La marcha es de unas dos horas hasta el lado catalán, cuatro kilómetros combinados de bajada y ascenso; al pie del puente Segué, que comunica Aragón con Cataluña, está el embarcadero aragonés. Se puede optar para el regreso a Montfalcó por el kayak (lo ofertan dos empresas aragonesas, Montrebei Explora y Guías del Montsec) o el catamarán de Montrebei Explora. "Es bueno estudiar las opciones previamente; reservar los servicios ‘online’ es lo más aconsejable, sobre todo en estos momentos", concluye Cristian.
Artículo incluido en la serie 'Aragón es extraordinario'.
