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La tirolina de Fuentespalda, lista para volver con su salto de récord
Con dos kilómetros de extensión, es la más larga de Europa entre las que son dobles. El servicio se ha retomado esta semana en la localidad del Matarraña.
Con dos kilómetros de extensión, la de Fuentespalda es la tirolina doble más larga de Europa y, si se tiene en cuenta que está adaptada para el uso de personas con movilidad reducida, se convierte en la número uno del mundo con estas características.
Localizada en el corazón de la comarca turolense del Matarraña, la tirolina, que se estrenó en agosto del año pasado, ha recuperado sus servicios esta semana, coincidiendo con el arranque del mes de julio, después de estos meses de paréntesis.
Prácticamente nada ha cambiado en el funcionamiento del servicio. Las reservas se pueden realizar a través de internet y las tarifas se mantienen, con un coste de 28 euros para el salto individual y de 50 el tándem, entendiéndose éste, por ejemplo, por un adulto y un niño con un peso máximo entre ambos de 150 kilos.
En cuanto a los horarios, hay saltos todos los días, de 10.30 a 13.30 y de 15.00 a 20.30 horas en la temporada de verano. Estos podrán variar según avancen los meses, dependiendo de la luz solar, aunque habitualmente se mantienen así hasta octubre.
Como novedad en este reestreno, la tirolina de Fuentespalda ahora ofrece la posibilidad de realizar un salto nocturno, en los días de luna llena y luna nueva, así como en las cinco jornadas que rodean a estas fechas. En total, cinco oportunidades en cada luna para saltar a la oscuridad. El precio en este caso es de 35 euros, con servicio de diez a doce de la noche en los días señalados.
La bajada en tirolina doble más larga de Europa dura minuto y medio
Tal es la velocidad que alcanza la tirolina de Fuentespalda que los dos kilómetros de extensión se recorren en apenas un minuto y medio. A veces, según el peso, el viento y el aerodinamismo de los saltadores, se han llegado a alcanzar velocidades de hasta 220 kilómetros por hora.
El salto se produce desde la ermita de San Miguel, a las afueras de la localidad de Fuentespalda. Está a mil metros de altitud y la bajada termina a 800. El transporte de la empresa se encarga de llevar al punto más alto y recoger en el más bajo a los usuarios, que pueden aparcar sus coches en el edificio Cubic, situado en las instalaciones del polideportivo municipal. Deberán estar allí 30 minutos antes de la hora contratada para repasar un cuestionario de seguridad, equiparse con el material necesario y recibir las indicaciones oportunas sobre qué se puede hacer y qué no durante el salto.
La tirolina también la pueden usar personas con movilidad reducida, ya que cuenta con sillas de ruedas adaptadas que permiten este salto. Gracias a ello, la de Fuentespalda es la tirolina doble adaptada más larga del mundo. En la bajada, se dispone de una plataforma hidráulica donde se está esperando al usuario con su silla de ruedas o las adaptaciones que emplee para su movilidad habitual.
Más de 4.000 saltos en seis meses de vida
El primer año de vida de la tirolina de Fuentespalda se ha visto truncado por los inesperados acontecimientos del coronavirus, que obligaron a cerrar las instalaciones cuando hacía apenas seis meses que se habían abierto.
Pero su éxito ya apuntaba maneras, con más de 4.000 saltos contratados entre agosto del año pasado y marzo. Una cifra nada desdeñable teniendo en cuenta que buena parte de dicho periodo han sido meses de invierno. “Cuando estábamos medio arrancando y de cara a la primavera, tuvimos que cerrar”, lamenta Yolanda Peralta, empleada de la empresa Tirolina Fuentespalda.
Según comenta, la reapertura arranca con los primeros fines de semana bastante ocupados, no así para el resto de días, durante los que las reservas son más puntuales. Para adaptar las instalaciones y el servicio a la nueva situación, los clientes reciben unas indicaciones especiales donde se advierte, entre otras cosas, de que el uso de mascarilla es obligatorio tanto en la oficina de registro como durante el transporte. Además, para agilizar los trámites y evitar las aglomeraciones, se pide de forma excepcional que se lleve impreso y firmado el acuerdo de responsabilidad.
La empresa suministra geles en los accesos, en la plataforma de salida y en la de llegada, y los arneses de ala delta que se emplean para los saltos se desinfectan a diario con baños de vapor a 60 grados de temperatura, para no dañar el material con otras sustancias.
Saltadores llegados desde una decena de provincias
Los clientes habituales de la tirolina de Fuentespalda son parejas, grupos de amigos y familias que, en este último caso, pueden aprovechar los saltos en tándem de padre o madre e hijo o hija al mismo tiempo. También hay paquetes para saltos dobles y precios reducidos para grupos, previa consulta.
La buena ubicación de Fuentespalda, una localidad de apenas 300 habitantes que limita al norte con Cataluña y al sur con la Comunidad Valenciana, hace que la procedencia de los usuarios traspase las fronteras de Aragón.
Así, además de los zaragozanos y los turolenses, los saltadores de la tirolina llegan hasta Fuentespalda desde las provincias de Tarragona, Castellón, Valencia e incluso Barcelona o Madrid, las más alejadas.
Los hay quienes están de ruta por el Matarraña haciendo turismo y aprovechan para combinar los días tranquilos con una buena dosis de adrenalina dando este salto. Otros, por ejemplo las parejas, optan para pasar el día en la localidad, contratando el pack para dos que incluye el salto y un menú para comer.
En cualquiera de los formatos, cuando casi se cumple un año de su apertura, la tirolina de Fuentespalda vuelve a estar operativa para continuar proporcionando emociones fuertes a quienes se atrevan con este salto de récord.
