Tercer Milenio

En colaboración con ITA

Exovite: impresiones 3D para inmovilizar fracturas

El Hospital MAZ de Zaragoza ha probado con esta empresa trescientas de sus férulas. Traumatólogos e ingenieros han generado mejoras en estos particulares vendajes, que se imprimen en siete horas aunque sus autores quieren llegar a los cinco minutos.

Nada que ver con las escayolas y vendajes convencionales para inmovilizar fracturas. Aunque tus amigos no puedan escribir en ellas, las férulas impresas en 3D por Exovite parecen parte de un atuendo futurista. Estética aparte, estas férulas son las únicas que permiten adelantar la rehabilitación mientras las llevas puestas, porque tienen huecos con electrodos que aportan electroestimulación a la zona. Eso sí, se acorta el tiempo de baja laboral.


El Hospital MAZ de Zaragoza es ya socio de Exovite, porque con él han probado trescientas de estas férulas 3D en los últimos cinco meses. “Estamos aprendiendo mucho de los traumatólogos -dice Juan Monzón, fundador de la empresa-; y eso es lo que queremos, aprender de nuestros clientes para mejorar y personalizar el producto al máximo”.





Desde que trabajan con MAZ, las férulas de inmovilización de Exovite son acolchadas. Las imprimen en un “plástico antibacteriano y antialérgico” y las recubren por dentro con una “silicona de grado médico” fabricada por ellos mismos. Además, son los médicos quienes indican dónde dejar los huecos en este particular vendaje, según el tipo de fractura y necesidades del paciente, para situar en ellos los electrodos.


“Cuando tenemos cualquier parte del cuerpo inmovilizada -explica Monzón-, perdemos en ella un 8% de masa muscular a la semana. Con nuestras férulas esto no sucede, porque la estimulación eléctrica en la zona lo evita; ahorra en un 30% el tiempo posterior de rehabilitación”. Esto, además de muy novedoso, es muy interesante para las mutuas.


E interesante para médico y paciente, sobre todo para este último, es un aspecto de la electroestimulación de Exovite también innovador: “Los electrodos se conectan al móvil del paciente a través de un pequeño aparato bluetooth y la información es recibida en su móvil por el médico, que es quien controla en la distancia el nivel muscular del paciente y programa o modifica la electroestimulación a aplicar”, cuenta Monzón.




Así que si vamos a la MAZ con una rotura, habrá que esperar a que baje la hinchazón y se pueda escanear la parte fracturada. Al día siguiente tendremos ya nuestra férula personal. Exovite trabaja ahora en mejoras en sus impresoras, para llegar a “imprimir en 5 minutos”. Se presentan como el equipo de I+D de los hospitales en materia de inmovilizaciones. Muy pronto empezarán a trabajar con otros cinco centros sanitarios repartidos por España y el salto a Estados Unidos lo tienen prácticamente dado.


Más vídeos:

Entrevista a Juan Monzón

El fin de la escayola

Zaragoza Maker Show 2015



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