Cuando las borrascas y temporales arrecian, nada mejor que dar protagonismo a las precipitaciones, huracanes, tormentas… Y a la mutante del mismo nombre que las controla -o no-; a su mentor, el profesor Xavier; y al resto de los X-men. Que en la tercera entrega de la saga y tras el anuncio del descubrimiento de una cura para los mutantes, se enfrentan a la Hermandad liderada por Magneto para salvar a los humanos ordinarios. Claro que una cosa es hablar de precipitaciones y otra precipitarse y meter la (telé)pata y el gazapo. Como vemos en el siguiente diálogo. Pero como todo tiene remedio, puedes encontrar la ‘cura’ en ‘Que ciencia te acompañe’. Por cierto, ¿de qué disciplina dice que es profesor, estimado Xavier?

El diálogo

-Según el parte meteorológico hoy iba a hacer sol -dijo el profesor Xavier interrumpiendo los pensamientos de Tormenta.

-Ah, lo siento -se disculpó Tormenta al percatarse de que los oscuros nubarrones que la preocupaban se habían hecho realidad. Son los gajes que tiene ser capaz de modificar los fenómenos meteorológicos.

-No hace falta ser telépata para ver que te preocupa algo.

-No lo entiendo. Magneto es un fugitivo; hay un mutante en el gabinete; un presidente que nos entiende; ¿por qué seguimos ocultos?

-No nos ocultamos, pero aún tenemos enemigos y debo proteger a mis alumnos. Lo sabes.

-Sí, pero no podemos ser alumnos para siempre.

-Hace años que no te considero una estudiante. De hecho, había pensado que tal vez pudieras ocupar mi lugar algún día.

-Pero Scott…

-Scott ha cambiado. La muerte de Jean le ha afectado. Sí, las cosas parecen mejorar, pero tú más que nadie sabes lo rápido que cambia el clima.

-Usted sabe algo que se calla.

Moraleja

Cuando no se sabe algo es mejor callar. Por mucho que uno sea telépata; so riesgo de meter la pata.