"¡Guerra! La República se desmorona bajo los ataques del despiadado lord Sith, el conde Dooku. Hay héroes en ambos bandos. El mal está por doquier. En una contundente jugada, el diabólico líder droide, el general Grievous, ha irrumpido en la capital de la República y ha secuestrado al canciller Palpatine, líder del Senado Galáctico. Mientras el ejército droide separatista trata de huir de la capital sitiada con su valioso rehén, dos caballeros Jedi lideran una misión desesperada para rescatar al Canciller cautivo...".

Así comienza 'Star Wars. La venganza de los Sith', Episodio III  de la saga, estrenado en la primavera de 2005.

'La venganza de los Sith' tiene más de 90 minutos de animación y 2.200 tomas de efectos visuales, superando de esta forma los récords de las anteriores películas de la saga 'Star Wars' y situándose a años luz de otras producciones que han hecho uso intensivo de los efectos visuales, como la trilogía “El señor de los anillos”. Hay algunas escenas con 50 o 60 elementos distintos, la mayoría de los cuales el espectador ni siquiera se dará cuenta de que son efectos. Muchos de esos efectos 'invisibles' fueron esenciales para recrear los ambientes de los ocho planetas que aparecen en la película, a saber, Coruscant, Naboo, Utapau, Mustafar, Alderaan, Tatooine, Dagobah y Kashyyyk, a los que se puede añadir el cinturón de asteroides Polis Massa.

El rodaje empezó en los estudios Fox (Australia), siguió en los estudios Shepperton (Inglaterra) y acabó en los estudios Elstree (Inglaterra). Casualmente o de forma intencionada, esta película de la serie finalizó en el mismo sitio que se inició la primera película de la serie, el Episodio IV. También se filmaron exteriores en China, Tailandia, Suiza, Túnez y en el volcán siciliano en erupción Etna.

En las alturas del cielo del planeta urbano de Coruscant se libra una de las batallas más largas de toda la serie, 8 minutos de acción sintética ininterrumpida. Esta vez la acción no ocurre en el espacio exterior, sino en las alturas de su atmósfera, lo que permitió mostrar rastros de humo, fuegos y efectos pirotécnicos que serían imposibles de realizar si la lucha se hubiese realizado en el vacío exterior, como fue el caso de las luchas anteriores que aparecen en la serie.

Otra hazaña de los efectos especiales es la recreación del entorno amenazante, impredecible y hostil del planeta volcánico Mustafar. Las imágenes fueron generadas informáticamente utilizando técnicas de tratamiento digital de imagen, combinando máscaras digitales elaboradas mediante imágenes de maquetas (de más de 10 metros) y escenas reales del Etna en erupción. Como curiosidad puede decirse que la reluciente lava que discurría por las maquetas era metilcelo, un espesante que se utiliza en los batidos. Se bombearon miles de litros de 'lava', creando un río de metro y medio de ancho.

En el apartado paisajístico merece la pena destacar, el mundo de vegetación exuberante de Kashyyyk, lugar de procedencia de los wookies, que se recreó mediante efectos digitales sintéticos a los que se añadieron las imágenes de la detallada miniatura del 'árbol heroico'.

Y qué decir de los más de 385 personajes sintéticos generados. En este caso seleccionaremos dos de ellos. El primero es la recreación infográfica del maestro Jedi Yoda, que tal vez se pueda considerar como uno de los logros más destacables de ILM a lo largo de su singladura. El modelado de la piel, sus movimientos y el comportamiento de su ropa son impresionantes. El segundo es el no menos destacable personaje digital del general Grievous, escalofriante simbiosis de alienígena y androide, que justifica la existencia de las tecnologías que acabarán siendo mejoradas y aplicadas para salvar la vida del destrozado Anakin.

Por cierto, y aunque no son básicamente efectos especiales, me gustaría finalizar haciendo referencia a la magnífica escena en la que Anakin se transforma en el siniestro y biónico Darth Vader. Escena diseñada basándose en el uso inteligente de diferentes tipos de luces para conseguir una iluminación generadora de un gran impacto emocional en el espectador.

También fue la única película de la saga que recibió la clasificación PG-13 de la Motion Picture Association of America por el argumento trágico de la historia. El Episodio III fue nominado a la categoría de Mejor Maquillaje de los premios Oscar.

Francisco Serón es catedrático de universidad y geek.