Finalmente, y tal y como estaba anunciado, el óscar fue el renacido. Sí, sí, has leído bien: el renacido fue el óscar. Porque las estatuillas entregadas este año son una réplica aproximada de la original, o más bien un híbrido inspirado en aquella. Y ello gracias a la moderna tecnología de impresión en 3D.

Básicamente el procedimiento seguido consistió en realizar el escaneado tridimensional de las estatuillas original y actual. Y a partir de ellos y mediante el oportuno tratamiento informático, fundir ambos diseños y generar el modelo 'vintage' de esta edición. Una vez definido, se recurrió a una impresora 3D para obtener un modelo de plástico, a partir del cual se produjo el molde con el que se elaboraron las estatuillas definitivas.¿De qué material están fabricados los óscar?

La estatuilla posteriormente (en 1939) bautizada como óscar comenzó a entregarse en 1929 y al principio se elaboraba en bronce chapado en oro. Pero a los poco años se optó por fabricarla en britanio o metal británico, una aleación de estaño (93%), antimonio (5%) y cobre (2%), ideal para estos fines por ser más dúctil… y más barata; con el pertinente baño de oro. Una composición que desde entonces -y a excepción del periodo entre 1942 y 1944, cuando la escasez de metales debida a la Segunda Guerra Mundial motivó que se fabricasen con escayola- se ha perpetuado en una deslumbrante figura de 34,3 cm y 3,85 kg.

A la vista de estos antecedentes, ¿qué sucede con los customizados de esta edición de 2016?, ¿es oro, bronce o britanio todo lo que reluce?

A continuación damos las claves para deducirlo a ojo de buen cubero: ¿Se han prodigado este año los eufóricos galardonados en celebraciones en pie con el puño en alto agitando efusivamente el premio sobre sus cabezas? La densidad del metal británico es de 7,3 g/cm3. La del bronce (una aleación con un 57% de cobre, 40% de zinc y 3% de plomo) asciende a 8,70 g/cm3. Y la del oro, uno de los metales más densos, es de 19,3 g/cm3.And the winner is…

El bronce. Que de ese material están hechos los 'sueños' de esta edición. De forma harto sorprendente habría que añadir porque, a pesar de que el bronce es más denso, la estatuilla mantiene el tipo. Vamos, que mide y pesa lo mismo que sus británicos predecesores. Cuando, en teoría, al sustituir el britanio por bronce su peso debería subir hasta casi los 5 kg. Por no hablar (y calcular) si realmente fuera de oro macizo, con lo que el óscar alcanzaría los 10 kg y los referidos alardes quedarían restringidos al Stallone de turno. De hecho, y pensando en las celebraciones, lo ideal sería recuperar la escayola (sulfato de calcio hidratado), tan ligera (densidad = 2,3 g/cm3) que apenas alcanzaría 1,2 kg.¿Dónde está la trampa y el cartón? ¿Han estilizado aún más a óscar?, ¿se te ocurre alguna explicación?

No te vuelvas loco. El secreto está en la base. La del óscar 2016 es también de bronce esmaltado de negro. Mientras que la de sus predecesores era de níquel, un metal algo más pesado (densidad = 8,91 g/cm3).

Es el peso de la fama.

Pero no se vayan todavía, que aún hay más: si esta entrega se te ha hecho corta, puedes calcular cuánto pesaría (en teoría) la codiciada figura si, manteniendo las forma,s se fabricase en otros materiales. Por ejemplo:  Acero (7,83 g/cm3).  Aluminio (2,7 g/cm3). Cobre (8,89 g/cm3). Plata (10,5 g/cm3). Platino (21,45 g/cm3). Titanio (4,50 g/cm3). Hierro (7,86 g/cm3)