La concejala delegada de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Zaragoza, Teresa Artigas, ha avanzado el compromiso del equipo de gobierno en prevenir la presencia de sustancias con contaminantes hormonales, técnicamente conocidos como disruptores endocrinos.

De esta forma, el Consistorio dará cumplimiento a una moción de CHA, aprobada en octubre de 2016, para promover la aplicación de medidas para reducir en lo posible la exposición de la población y del medio ambiente a los contaminantes hormonales, por iniciativa de un conjunto de entidades sociales, vecinales, ecologistas y sindicales.

"Haciéndonos eco de los efectos directos de los EDC en la salud humana y los efectos negativos en el medio ambiente, la Concejalía de Medio Ambiente y Sostenibilidad considera importante la adopción de una serie de medidas encaminadas a la reducción de la exposición de la población y el medio ambiente a los contaminantes hormonales", ha señalado Artigas en rueda de prensa.

Las acciones prioritarias son aplicar, preferentemente, métodos de lucha contra plagas y de control de hierbas que no utilicen sustancias químicas tóxicas. En este sentido, el Ayuntamiento de Zaragoza ha prohibido en sus contratos el uso de glifosato como herbicida.

También se apuesta por el uso de productos libres de EDC, en la medida de lo posible, a través de cláusulas en contratos de centros públicos de titularidad municipal. En la actualidad en los comedores de las guarderías municipales ya tienen adoptados estos criterios en sus compras y se enmarca en el proyecto global del Gobierno de alimentación saludable y sostenible.

Comisión

Asimismo, el Ayuntamiento creará dentro del Consejo Sectorial de Medio Ambiente (Agenda 21 Local) una comisión 21 sobre contratación sostenible y saludable para abordar estas cuestiones y hacer un seguimiento específico de todo lo que tenga que ver con los contaminantes hormonales.

De este modo, se realizarán tareas de seguimiento para comprobar que los productos utilizados en las distintas contratas no incorporan EDC. Para ello se está trabajando en la creación de una mesa de seguimiento compuesta por técnicos de salud pública, medio ambiente, contratación y agentes sociales.

También se incluye reducir, en lo posible, el tránsito de automóviles y adoptar políticas que tiendan a reducir la exposición de la población y el medio ambiente a contaminantes atmosféricos, potenciando y mejorando el transporte público y no motorizado, especialmente a pie y en bicicleta.

Otras medidas es la realización de campañas informativas relacionadas con los disruptores endocrinos y los posibles efectos sobre la salud; además de habilitar en la web municipal un espacio en el que se informe de las medidas tomadas para reducir el uso de estas sustancias e informar de los perjuicios que ocasionan.

Exposición

Artigas junto con el miembro de CC.OO., Luis Clarimón, y la integrantes de Ecologistas en Acción, Dolores Romano, ha presentado la exposición 'Nuestro futuro robado. Efectos de las sustancias disruptoras en nuestras vidas'.

La muestra expone que en las últimas décadas se ha incrementado, sobre todo en los países más industrializados, la incidencia de enfermedades del sistema reproductor (infertilidad, malformaciones, pubertad precoz), de cáncer (ovarios, mama, testículos, tiroides), y de enfermedades neurológicas, inmunológicas y metabólicas (síndrome metabólico, obesidad, diabetes).

También se ha observado el declive de la capacidad reproductiva de las poblaciones de numerosas especies de animales silvestres, incluyendo invertebrados, anfibios, aves, peces, y mamíferos.

Estas enfermedades están relacionadas con la exposición, en particular durante el desarrollo uterino, a contaminantes ambientales que tienen la capacidad de alterar el sistema hormonal, los disruptores endocrinos, sustancias que se pueden encontrar en alimentos, en productos y artículos de consumo habitual, en los entornos laborales o como contaminantes ambientales y para los que no existe un umbral de exposición seguro.

El coste sanitario en la Unión Europea de solo algunas de las enfermedades relacionadas con estas sustancias se estima en más de 150.000 millones de euros anuales.

Esta exposición pretende explicar qué son los disruptores endocrinos, cuáles son sus efectos para la salud y el medio ambiente, las alternativas que existen y algunas iniciativas llevadas a cabo por diferentes gobiernos, empresas y organizaciones sociales para eliminar o reducir el uso y la exposición a estas sustancias.

La muestra, ubicada en el Centro de Documentación del Agua y el Medio Ambiente (Cdama) permanecerá abierta hasta el próximo día 20 de diciembre. El contenido de la exposición ha sido desarrollado por Ecologistas en Acción y CC.OO., pero ha contado con el apoyo de numerosas entidades sociales, ecologistas y vecinales.

Este miércoles 13 de diciembre, a las 18.30, también tendrá lugar en el Cdama una mesa redonda sobre las Sustancias Disruptoras Endocrinas. Acciones desde el Ayuntamiento para la prevención de contacto con contaminantes hormonales.

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