Olvidarlo todo, perderse del mundo, de la familia, de los amigos, de uno mismo...  Este miércoles se celebra el día mundial contra el alzhéimer. Esta enfermedad neurodegenerativa es la forma más común de demencia. En su avance, afecta a las áreas cognitiva, social y lingüística.

Según los últimos datos de alzhéimer Aragón, en la actualidad afecta a 33.000 aragoneses, sobre todo población de avanzada edad.

Se trata de una enfermedad para la que todavía no hay cura. Sin embargo, hay tratamientos. Mediante ejercicios físicos y cognitivos tratan de conseguir mejorar la calidad de vida de las personas afectadas y sus familias. Para ello, los especialistas señalan que la detección precoz “es un factor fundamental”.

Algo que se hace difícil para la mayoría de los enfermos, ya que es frecuente que pasen por una etapa de negación al inicio del diagnóstico, como le ocurrió a la zaragozana María Luisa Villalba, de 70 años, trabajadora jubilada de una pastelería a quien le diagnosticaron alzhéimer hace cinco meses.

Ayudada por los profesionales de la Asociación de Familiares de Enfermos de Alzhéimer (AFEDAZ) y por su familia, María Luisa combate esta enfermedad, día a día. “Fui mi hermana quien me dijo que estaba más despistada. Yo siempre había tenido una memoria de caballo”, cuenta Villalba, quien no dudó en ponerse en manos de profesionales para luchar contra los efectos de esta devastadora enfermedad.

Junto a ella, su marido y su hijo que, como tantos otros cuidadores, asisten a un proceso doloroso y en el que a veces también se ven perdidos.

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