Casi un 90% de la población española conoce qué es el cigarrillo electrónico, de ellos un 47,5% considera que este dispositivo puede suponer un riesgo para la salud y, por tanto, más del 58% pide que sean regulados como los productos del tabaco, según se desprende del Barómetro Sanitario 2014.

Esta encuesta, realizada por el Ministerio de Sanidad en colaboración con el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), muestra que solo un 16% de la población manifiesta que estos dispositivos no suponen ningún riesgo para la salud.

En cuanto a si este dispositivo puede inducir a fumar, un 43,7% a respondido afirmativamente frente al 24,9% que no cree que promueva el consumo de tabaco; mientras un 44,1% no cree que sea una herramienta para dejar el hábito frente al 27,6% que cree que puede ayudar.A favor de la Ley del tabaco

Cuatro años después de la entrada en vigor de la actual Ley Antitabaco, solo un 4,7% de la población afirma haber dejado de fumar tras su puesta en marcha. Un 27,6% ha manifestado que su consumo no se ha visto afectado, mientras que un 8,1% admite que fuma menos y un 1,3 afirma que fuma más.

En enero de 2011 entraba en vigor la actual ley antitabaco que prohibía su consumo en locales de ocio cerrados (bares, restaurantes, discotecas, centros comerciales), eliminaba los puntos de fumadores en aeropuertos, y en espacios abiertos como las puertas de los hospitales y colegios y los parques infantiles.

Un 33,3% considera que las medida se están cumpliendo totalmente en los bares y restaurantes; mientras que en los alrededores de hospitales y colegios, solo un 9,5 afirma que la medida se cumple frente al 15,6 % que considera que no se está cumpliendo en absoluto.

No obstante, un 27,4% considera que las medidas fueron acertadas; un 29,5% no cree necesario adecuar las medidas en beneficio de los fumadores; mientras que un 18,5 estaría totalmente de acuerdo en implantar nuevas medidas en beneficio de la salud de los ciudadanos.

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