El 25% de las mujeres aragonesas mayores de 50 años tienen densidad ósea baja

Un grupo de médicos y enfermeras ha creado un manual de basado en la evidiencia científica.

El 25% de las mujeres mayores de 50 años tiene una densidad ósea más baja de lo que debe, porcentaje que se dobla en la población femenina que supera los 70 años, una situación que puede derivar fracturas vertebrales o de cadera por lo que se debe prever y diagnosticar cuanto antes.


Por ello, un grupo de 21 médicos y enfermeras de centros de salud de Aragón ha elaborado la Guía para el manejo práctico de la Osteoporosis en el Medio Asistencial Primario, un manual de consulta rápida basado en la evidencia científica, ha informado el Gobierno aragonés.


La guía resume "en cinco o seis hojas" todo lo que un médico de centro de salud debe hacer para abordar con seguridad esta enfermedad, explica el doctor Mariano Blasco, médico de familia del Centro de Salud Delicias Sur de Zaragoza y coordinador de la misma.


El objetivo de este trabajo, avalado por el Grupo de Osteoporosis de Aragón (Gopar), "es reducir el riesgo de fractura ósea", apunta Blasco, para el que la implicación de Enfermería es fundamental.


"Nosotras trabajamos con el paciente en la aplicación de medidas higiénico-dietéticas, la prevención de fracturas y el seguimiento y adhesión de los tratamientos farmacológicos", indica María José Peña Gascón, responsable de los equipos de Enfermería del Sector Zaragoza II y miembro de Gopar.


Según los expertos, la única manera de plantar cara a esas cifras "tan contundentes" de la osteoporosis es tratarla antes de que aparezca.


Detrás de estas cifras hay dolor, hospitalizaciones y en muchos casos el inicio de una cadena de complicaciones que lleva a la muerte, explican los especialistas.


"Esta enfermedad no se muestra hasta que se sufre la fractura y nosotros debemos trabajar de una forma proactiva, buscándola para evitar esas fracturas en la medida que podamos", señala Blasco.


La reducción de la masa o volumen del hueso es un hecho común en el proceso fisiológico del envejecimiento.


En el caso de las mujeres, la incidencia es mucho mayor, ya que además de que nacen con menor masa ósea que los hombres, la pérdida de esa masa también es mucho más rápida a partir de la menopausia.


La conclusión que extraen médicos y enfermeras es la necesidad de trabajar en prevención y en diagnosticar cuanto antes las situaciones de riesgo.