Continúan los problemas de suministro de medicamentos en las farmacias aragonesas

La DGA gastó 38.000 euros en fórmulas magistrales el primer semestre para paliar la falta de suministro.

Imagen de archivo de una farmacia en Zaragoza.
Continúan los problemas de suministro de medicamentos en las farmacias aragonesas
Mariano Castejón

Cuatro meses después de que la DGA autorizara volver a la formulación magistral para paliar el desabastecimiento de fármacos, los problemas de suministro por parte de algunos laboratorios continúan y se extienden a al menos siete medicamentos que están siendo elaborados en las farmacias aragonesas. Son Efudix, Eskazine, Fulcin, Fortecortin, Parnate y Sulfona Oral


Desde la DGA insisten en que se trata de un problema derivado de "la industria farmacéutica", que no suministra el principio activo a los almacenes y, por consiguiente, "estos no pueden hacerlo llegar a las boticas para poderlo dispensar".

Gasto en formulación magistral

No obstante, desde que saltaran las primeras alertas en mayo, la DGA lleva meses asumiendo el coste de la elaboración de fórmulas magistrales para paliar la falta de suministro en las farmacias aragonesas. Un coste añadido para el departamento de Sanidad que, según estiman, en el primer semestre del año ascendía a 38.000 euros.


Uno de los más problemáticos es el Fortecortin, de Merck, que desde principios de verano, siguiendo el protocolo de la Agencia Española del Medicamento, se está importando desde Austria "en las cantidades requeridas por el mercado". Los laboratorios explican que hubo un "retraso en la producción" de su planta de Mollet del Vallés a raíz de una serie de mejoras introducidas, pero insisten en que hoy por hoy "no hay ningún problema a la hora de retirar dicho fármaco como medicación extranjera". No obstante, desde el Foro Aragonés del Paciente subrayan las "molestias" ocasionadas en aquellos casos en los que el enfermo o los familiares -sobre todo para quienes viven en los pueblos- deben desplazarse a su hospital de referencia para poder disponer de este tratamiento oncológico. 

Trastornos mentales

En otros casos, como sucede con el Eskazine o el Deanxit, el problema es mayor para el paciente, que se ve obligado a encontrar otra alternativa terapéutica tras años de medicación con un mismo fármaco. En el caso del primero, indicado en casos de esquizofrenia, ansiedad y otros trastornos mentales, el laboratorio AMCo confirmó a este periódico el cese de su fabricación aludiendo a la "dificultad de fabricar la formulación de este fármaco con los estándares de calidad requeridos" y dejan en manos de los psiquiatras la prescripción de un sustituto. "Hay diferentes clases de antipsicóticos de la misma clase que la trifluoperazina (Eskazine) como la proclorperazina, flufenazina o perfenazina. No obstante, el laboratorio no respalda ninguno de estos o cualquier otro producto como una alternativa", puntualizan.


En Aragón, según indican fuentes del Hospital Clínico Lozano Blesa, este fármaco era uno de los más usados en pacientes con trastornos neuróticos y aunque hay alternativas, los expertos reconocen que su retirada no deja de ser una "pérdida para el arsenal terapéutico".


"Siempre que perdemos un fármaco de estos es una pérdida porque ahora hay que ir probando hasta acertar con otro principio activo con el que el paciente funcione igual de bien", reconoce el doctor Pedro Manuel Ruiz, quien apunta al "escaso beneficio económico" que pudiera tener este fármaco para explicar las causas de su desaparición. 


La situción es similar en el caso del Deanxit, que se dispensa a través del servicio de medicamentos extranjeros. "Ahora buscamos otras alternativas y al final acertamos, pero es curioso que pacientes que funcionaban muy bien con dosis bajitas de este, al cambiarles nos cuesta dos o tres intentos", confiesa este psiquiatra. 

Falta de suministro de BCG en hospitales

Otro de los tratamientos que presenta problemas de suministro a nivel estatal es el BCG (Bacillus Calmette-Guerin), que se limita al ámbito hospitalario. El urólogo Alejandro Timón, especialista del Clínico, explica que este se aplica para tratar el carcinoma vesical superficial, en aquellos pacientes que una vez operados de cáncer de vejiga presentan riesgo "múltiple" de volver a desarrollar la enfermedad. En Aragón, indica, este fármaco es muy usado, ya que "el carcinoma de veijga tiene en la Comunidad una de las tasas más altas de incidencia en España". No obstante, este especialista advierte de que existen otras alternativas, como la mytomicina, para tratar estos casos si el desabastecimiento dejara de ser algo "puntual". 


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