Riendo se cura todo

En una farola de una calle de Teruel se encontraba un cartel que decía así: "Arranca una de estas tiras si no has sonreído todavía, o guarda una si sabes de alguien que no lo ha hecho".


A continuación se encontraba una hilera de tiras en las que en todas se leía esta frase: "Riendo se cura todo".


La ciudad de Teruel se bañaba ahora de carteles rosas, cualquier callejuela se veía ahora más animada, y en los árboles de grandes avenidas ondeaban estos cartelitos.


El autor de esta idea poseía una forma distinta de ver la vida, cuya base era el optimismo, cierto es que no era un principio muy común, pero es la clave para ser feliz, cuando miramos hacia la vida con otros ojos, todo puede cambiar, y si afrontamos los problemas con menos miedo, la vida sería de un color más rosa.


En una corchera de un piso de Teruel, una chica saca de una chincheta una tira de papel color rosa, la lee, la aprieta con el puño y mira por la ventana al cielo, pero eso, ya es otra historia…