A pesar de que en sus inicios resultaba desconocido para los responsables de numerosas empresas, el concepto de la responsabilidad social corporativa va calando cada vez más en las compañías y ya son un número importante de ellas las que cuentan con una política definida al respecto.

Es el caso de AB Cuentas, una entidad zaragozana fundada por Abel Bartolomé en 1997 y que cuenta ya con 21 empleados (19 mujeres y dos hombres). Con departamentos de laboral, fiscal, jurídico y otro destinado a la protección de datos y la impartición de cursos de formación, la organización se dedica principalmente a la tramitación de altas y bajas de empleados, la redacción de nóminas, el asesoramiento en lo referente a la inspección de Trabajo y a temas fiscales, auditorías de cuentas y operaciones mercantiles, entre otras cuestiones.

Unas labores diarias en la que el adecuado trato al cliente es fundamental. «Por eso nos llena de orgullo y valoramos tanto la obtención del sello de Responsabilidad Social Corporativa del Gobierno de Aragón, pues los clientes no nos ven trabajar en el día a día, de forma que lograr un reconocimiento como este de manos de una institución hace que estos sepan que están en buenas manos y que confíen más en nosotros», sostiene Javier Subías, apoderado de AB Cuentas.

Subías apunta que, aunque el concepto de la responsabilidad social corporativa es relativamente nuevo, en la empresa se implementan sus técnicas prácticamente desde su fundación, las cuales tratan de trasladar a sus clientes. «La conciliación familiar se ha favorecido siempre. El año pasado impulsamos la jornada intensiva para los trabajadores que tienen hijos y no les venía bien el turno de tarde», afirma el responsable de la entidad, quien añade que, de esta forma, los empleados son «más productivos, más felices y viven mejor».

Asimismo, en la compañía también hay una concienciación importante con respecto al medio ambiente. Sus integrantes reciclan todo el papel y el tóner que desechan, sus dos principales fuentes de contaminación, y hace años que sustituyeron los tubos de iluminación de xenon por lámparas led, más eficientes energéticamente.