PLAZA DE TOROS
Llenazo y revolcones en la primera mañana de vaquillas del Pilar
La plaza ha colgado el cartel de no hay entradas y ha vivido un gran ambiente en la primera sesión de vacas. La Cruz Roja ha atendido a 12 personas.
No había un asiento libre esta mañana en la plaza de toros. Así que los rezagados que han llegado a las vaquillas pasadas las ocho tenían dos opciones: ponerse a bailar con alguna charanga de las peñas o saltar a la arena. La primera mañana de vaquillas se ha saldado con un llenazo y algún revolcón sin consecuencias.
Las vaquillas son uno de los actos más populares de las fiestas. Aquí no se hablaba de crisis. Sonaba 'Paquito el chocolatero' y olía a bocadillo de longaniza. El público aplaudía a algún mozo que intentaba algún recorte diferente y a un chaval al que la vaquilla ha quitado hasta los calzoncillos.
En las gradas, también se escapaba algún bostezo. Para muchos, todavía era sábado. El público de las vaquillas se puede clasificar a grandes rasgos en tres perfiles: los que vienen de empalmada, los que han dormido un poco y las familias con niños recién levantados.
“Me gusta venir con los amigos para pasar el rato, hay muy buen ambiente. Yo soy de una peña y voy a venir todos los días”, contaba Javi, de 33 años, de la peña El Brabán. “Yo vengo hoy pero no sé si vendré más días. Estas fiestas hay menos dinero para gastar”, comentaba su amigo Isaac.
“Vendremos todos los días, menos lunes y martes, que nos obligan a ir al instituto. Hemos dormido solo dos o tres horas. Luego iremos a desayunar y a las ferias”, afirmaban Javier, Sandra y Rubén, de 15 años.
Hacia las nueve, empezaron a salir bocadillos de las mochilas, era la hora del almuerzo. Muchos también aprovechaban para fumar un cigarro. Olga y Fran venían preparados con bocatas, galletas y refrescos para sus hijos de 5 y 4 años, Luis, Raúl y Marco. “A los chicos les gustan mucho las vaquillas. Venimos todos los años un día. No les cuesta madrugar y vienen con muchas ganas”, afirmaba Olga.
Casi dos horas después del inicio de las vaquillas, alguno se echaba una cabezada en las gradas, mientras otros seguían bailando y los más valientes se atrevían a saltar al ruedo. “Aquí estamos todos, esperando a ver si coge a alguno, pero que no le pase nada, eh”, comentaba un peñista entre el público.
La Cruz Roja atendió a 12 personas, de las que tres fueron trasladadas a centros hospitalarios por heridas leves: una, por fractura y dos, por contusiones.
