Hace unos meses, Peugeot revelaba la nueva generación de su modelo 3008, y aunque solo se trataba de una presentación estática, quedó claro el cambio de rumbo radical respecto al modelo anterior. El recién llegado crecía en tamaño, robustez, estética y calidad, ascendiendo un peldaño más hacia el segmento premium, y presumiendo, ahora sí, de tener un ADN de verdadero todocamino.

Diferente al resto

Precisamente en un segmento ciertamente saturado, el de los SUV, donde lo difícil es sorprender y no parecerse a los demás, el 3008 puede sacar pecho por desmarcarse del resto. Su frontal robusto, un capó poderoso y nervado, o unas ópticas cuyo contorno se prolonga por toda la cintura del vehículo, en forma de moldura cromada, probablemente captarán tu atención. En la zaga domina la triple garra luminosa, todo un símbolo de la marca, junto a un diseño limpio y moderno.

Detalles de calidad

En el interior, el 3008 destaca por sus materiales y ajustes. Lo primero que llamará la atención será la nueva generación del i-Cockpit de Peugeot. Para los más profanos, se trata de un cuadro de mandos, con un volante de menor tamaño, donde los relojes van dispuestos en su parte superior, evitando así que quites tus ojos de la carretera. Esta nueva generación presume de una pantalla de 12,3 pulgadas, así como de un volante de nueva factura, ahora con dos partes planas. Al principio te resultará extraño, pero pronto notarás sus virtudes. El diseño de todo el habitáculo, los ‘gadgets’ de equipamiento disponibles, y los materiales empleados, también captarán la atención de manera positiva.

Dinámica y motores

Ya que estamos al volante, tras haber probado la gama podemos confirmarte que su tacto de conducción, a pesar de tratarse de un todo camino, resulta excelente. Buena parte de la culpa recae en su nueva plataforma, en unas suspensiones adaptadas específicamente a cada mecánica, y en una notable reducción de peso del conjunto, algo que influye positivamente en la respuesta de sus motores. En gasolina se ofrecen dos opciones. Por un lado una mecánica tricilíndrica de 1,2 litros y 130 CV, y por otra un cuatro cilindros de 1,6 litros y 165 CV, dotado de turbo. En diésel, las variantes son cuatro. Dos versiones de 100 y 120 CV con una cilindrada común de 1,6 litros, y dos más de 150 y 180 CV respectivamente, con un cubicaje de dos litros. En combinación con cinco niveles de acabado, los precios de la gama oscilan entre 23.450 y 35.600 euros, descuentos incluidos. Todo un desafío...

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