La ilusión del Gordo de Grañén pervive en Aragón, que hoy espera repetir suerte

Loterías ha consignado casi 600.000 décimos para la Comunidad y el gasto medio por habitante se ha situado en 86 euros.

Un hombre compra varios décimos en una administración de lotería
La ilusión del Gordo de Grañén pervive en Aragón, que hoy espera repetir suerte
Efe

Si para los niños el día más especial de las fiestas navideñas es el 6 de enero, para los adultos lo es el 22 de diciembre. Millones de españoles llevan días esperando esta jornada en la que los bombos del Sorteo Extraordinario de Navidad de la Lotería Nacional girarán repartiendo millones de euros por todos los rincones del país. Aragón anhela que este año vuelva a repetirse la jornada del 22 de diciembre de 2011, cuando el Gordo cayó prácticamente íntegro en varias localidades de la provincia de Huesca y un tercer premio y varios quintos se vendieron en diferentes rincones de la Comunidad.


Hasta Aragón han llegado este año casi 600.000 décimos de lotería buscando comprador. La mayoría se han puesto a la venta en administraciones de la provincia de Zaragoza, pero es Huesca la que tiene mayor consignación por habitante: hasta 111,20 euros. Y es que muchos oscenses aún conservan la ilusión de que se repita la suerte que llevó en 2011 hasta Tardienta, Grañén, Sodeto y algunos de Huesca capital el número 58.268.


Los décimos de Navidad llegaron a las administraciones incluso antes del verano. Es una costumbre arraigada entre muchos ciudadanos comprar billetes de lotería en los lugares a los que acuden durante las vacaciones estivales o durante el otoño. Por aquello de '¿Y si cae aquí...?'.


Dicen los datos de Loterías y Apuestas del Estado que los aragoneses han gastado en este sorteo unos 86 euros de media. La región es la tercera que más dinero gasta en este sorteo, por detrás de Castilla y León y La Rioja. Eso a pesar de que muchos son conscientes de que las probabilidades de que les toque son muy reducidas: cada número tiene un 15% de posibilidades de ser premiado y la posibilidad de que sea el Gordo es de 1 entre 100.000.


Pero eso poco importa. Jugar a la Lotería de Navidad es para muchos una tradición más de estas fechas a la que pocos pueden escapar: según el sociólogo Roberto Garvía, comprar boletos para este sorteo es el acto irracional más extendido entre los españoles. "Cada vez que alguien compra un billete está violando los principios básicos de la ciencia económica (y, de paso, los de la teoría de la acción racional)", afirma este experto en su estudio 'Loterías: un estudio desde la nueva sociología económica'.

Cobro casi inmediato

Este será el segundo sorteo navideño con el que el Estado haga caja, ya que el 20% de cada premio superior a 2.500 euros irá a parar a las arcas públicas. Así, los décimos agraciados con el Gordo están premiados con 400.000 euros pero su propietario solo cobrará 320.500 euros. En el caso del segundo premio, dotado con 125.000 euros al décimo, la 'mordida impositiva' lo dejará en 100.500 euros.


Pero la principal novedad que trae este año el sorteo es que los que resulten agraciados con un premio podrán acudir a cobrarlo a partir de las 18.00 del mismo día 22 de diciembre.


Un clásico de la Lotería de Navidad es, también, el anuncio promocional. Desde que apareciera el ya famoso 'calvo de la Lotería', que llegó a grabar en la estación de tren de Canfranc, los responsables de Loterías y Apuestas del Estado no han dejado de innovar. En 2013 su apuesta les salió un poco rana, con un anuncio que generó más fobias que filias, pero este año la campaña publicitaria se puede decir que ha triunfado.


'Lo importante es compartirlo'. El eslogan del anuncio de 'El bar de Antonio' lleva semanas sonando en televisiones y radios y que miles de aragoneses esperan poner en práctica este lunes. No en vano Aragón es la cuarta comunidad donde más veces ha caído el Gordo de la Lotería de Navidad.