¿Cómo trabajar el mindfulness?

Aprovecha cualquier fase del día para centrar tu atención en el momento presente y alejarte del estrés.

No dejes que el ruido colapse tu mente.
¿Cómo trabajar el mindfulness?
Pixabay

Existen diferentes métodos para trabajar el mindfulness. Una técnica de atención plena cuyo principal objetivo radica en tomar conciencia del momento presente.

Se trata de un método que, además de reunir notables beneficios para el bienestar del ser humano, se puede realizar en cualquier momento. Tú decides cuándo y dónde es el momento y el lugar más adecuado.

Pero, ¿sabes cómo trabajar realmente el mindfulness? Esta práctica puedes llevarla a cabo de manera formar como informal. Esto significa que, desde que te levantas hasta que te acuestas, puedes aprovechar cualquier momento del día a día para realizarla.

Por ejemplo, nada más apagar el despertador. Desde que te despiertas sé consciente del momento, del aquí y del ahora. Antes de ponerte en pie e iniciar tu rutina, pregúntate qué tal has descansado y cómo te sientes en ese instante.

Vive de manera consciente todos los momentos del día. Aprecia el tacto del agua cuando te duches, el aroma que desprende el gel, las sensaciones que sientes al lavarte los dientes…

El salir de casa es un buen momento para conectar con tu cuerpo. Centra tu atención en tres elementos: la respiración, las posturas o gestos que adoptas y los movimientos que realizas en cada momento. Escucha el sonido de tus pies, siente la brisa del aire en tu rostro… Además, evita que cualquier pensamiento negativo pueda distraerte.

Escuchar con atención a tu compañero de trabajo es otro momento en el que puedes trabajar el mindfulness. Respira, vive el presente y agudiza tu oído para centrar toda tu atención en su mensaje. Evita interrupciones.

A última hora del día siempre es un buen momento para relajarte y echar la vista atrás. Piensa y revisa cómo te ha ido la jornada, qué sentimientos afloran en tu cuerpo… Utiliza un bolígrafo y una libreta si lo consideras necesario, allí podrás escribir y anotar todo lo que se te pase por la cabeza.

Una vez tumbado en la cama, antes de dormirte, puedes realizar ejercicios de inspiración y expiración para ayudar a relajar tu mente.

- Ir al suplemento de Heraldo Joven

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión