Aprender idiomas es cada vez más importante. Dominar una segunda lengua es cada vez más habitual, ya sea por motivos laborales o académicos. En la Asesoría de Movilidad Internacional del Cipaj dan apoyo e información a todos los jóvenes que quieren o van a viajar al extranjero. Muchas de las dudas surgen por los idiomas, sobre todo por cómo mejorar a la hora de expresarse y hablar con fluidez.

Apuntarse a una academia, hablar con nativos y ver series y películas en versión original son los consejos que siempre se dicen para mejorar en un idioma.Aquí te traemos siete recomendaciones extra, que puedes practicar tranquilamente desde el sofá de tu casa.

1. Deja de tener miedo

El primero y más importante. Muchas veces no soltamos ni una palabra por miedo a quedar mal o hacer el ridículo. Lo primero que debes saber es que nunca hablarás inglés como un inglés ni chino como un chino, principalmente porque no lo eres. Pero eso no significa que no vayas a hacerlo bien, así que di adiós a la vergüenza y empieza a soltarte.

2. Lee y estudia en voz alta

Practicar es el mejor método para ganar fluidez. Mientras estás estudiando, prueba a leer los textos en voz alta para mejorar la pronunciación y coger fluidez.

3. Grábate

Si no escuchamos nuestros propios errores es imposible que mejoremos. Cuando leas en voz alta, grábate a ti mismo y después evalúa tus propios fallos.

4. Utiliza un traductor

Cuando veas una palabra o expresión que no conoces, escríbela en un traductor o aplicación que te permita escucharla. Así aprenderás como suena y podrás repetir.

5. Crea tu propio diccionario de pronunciación

El inglés, el alemán o el francés son algunos de los muchos idiomas que no se pronuncian igual que se escriben. Un buen truco para mejorar el habla es crear tu propio diccionario, incluyendo las palabras tal y como se pronuncian y no cómo se escriben. Por ejemplo, ‘money’ - ‘dinero’ en inglés- se dice ‘mani’.

6. Traduce mentalmente

Cuando vayas en el autobús o haya anuncios en la tele prueba a traducir mentalmente lo que leas o lo que dicen. Así, ganarás agilidad y fluidez a la hora de hablar.

7. No te centres sólo en la gramática

Cuando queremos hablar en otro idioma, primero pensamos de manera básica en las palabras y después vamos creando la frase de manera más compleja. Aunque la gramática es muy importante en este proceso, a veces puede ser un freno para hablar con fluidez. De hecho, cuando se sabe mucha gramática, nos damos más cuenta de nuestros errores y hablamos más lento, porque nos da más miedo equivocarnos. La gramática es importante, pero más aún lanzarse sin miedo a hablar y mejorar a base de corregir errores.