"Los abogados del siglo XXI tienen que ser inconformistas positivos"

Entrevista con Juan Luis Falcón, socio-director de Garrigues en Zaragoza y responsable del Grupo de Empresa Familiar.

Juan Luis Falcón.
Juan Luis Falcón.
Garrigues

En un mundo en continuo cambio, la sociedad demanda abogados multifunción, que conozcan los entramados jurídicos en los que se mueven y que también sean capaces de desenvolverse en otros parámetros que nada tienen que ver con el derecho, pero que tan importantes son para la resolución de un caso. Su flexibilidad es esencial para los despachos de abogados actuales donde, además de un conocimiento preciso y amplio de las normas jurídicas, esperan de ellos habilidades para resolver problemas concretos.¿Qué cualidades debería tener el abogado del siglo XXI?

Entre sus principales cualidades, un abogado de hoy en día tiene que tener un comportamiento ético impecable, una visión global del mundo del derecho y una tendencia hacia la especialización. En definitiva, debe ser un inconformista positivo, que piense que todo es mejorable, y que genere valor para el cliente. En definitiva, que resuelva sus problemas.

¿Qué otro tipo de actitudes y aptitudes se les pide?

Otras cualidades destacadas es que tienen que ser empáticos, saber trabajar en equipo y estar muy orientados hacia el negocio y la creatividad. Su principal actitud es que sean profesionales y personas con actitud positiva.

¿Qué papel ocupan los conocimientos dentro de estos valores?

Conocer el mundo del derecho es una condición necesaria, pero no es suficiente. El perfil técnico tiene que ser impecable, pero únicamente con la técnica no se resuelven los problemas del cliente, hay que tener una visión global, especializarse y tener conocimientos de su sector empresarial para generar valor y encontrar una solución adecuada a su problema.¿Y la experiencia y la vocación?

La vocación de servicio y la experiencia son fundamentales, pero los abogados actuales necesitan otras cualidades adicionales. Hay que innovar día a día, porque en un mundo global como el que estamos, la experiencia es importante, pero no es suficiente para resolver un problema novedoso, porque el mundo cambia mucho más rápido que la normativa, y se requiere una gran capacidad de adaptación al nuevo entorno.

En todas las áreas del derecho, público y privado, es importante contar con otros valores, como la honradez, la equidad y la firmeza. ¿Cree que es importante comprender el problema social que ha podido provocar una situación y generar soluciones a partir del lenguaje jurídico?

Desde luego. Todo esto se enmarca dentro de lo que conocemos como valor añadido del profesional del derecho. Es importante quitarse la chaqueta y ponerse en el lugar del cliente y darle una solución real a un problema real, no basta solo con una argumentación jurídica impecable, hay que ir más allá y darle respuesta a sus preguntas y dilemas.¿Qué se espera actualmente del profesional del derecho?

Sin duda cualidades como la visión de negocio, capacidad de adaptación, inteligencia emocional, etc. Adicionalmente, del profesional del derecho se espera, sobre todo, un comportamiento ético intachable, y que tenga como máxima en su trabajo que ‘no todo vale’. Hay que ir más allá de la regulación en esta materia, y siempre superar los mínimos exigidos en transparencia y ética.¿Qué razones han motivado el cambio de perfil del abogado?

Vivimos en un mundo global en el que todo evoluciona a una velocidad de vértigo. La crisis económica ha generado grandes cambios en la sociedad y nos ha obligado a adaptarnos a ellos. Los despachos de abogados somos proveedores de servicios y tenemos que anticiparnos a buscar solución para problemas que no existían hace muy poco tiempo. Por eso es tan importante ser proactivos, adaptarnos al nuevo entorno y ponernos en la piel del cliente, asesorándolo e involucrándonos en el proceso de toma de decisiones.Hablamos de profesionales proactivos.

Efectivamente, con gran capacidad de adaptación al cambio, y pensando constantemente en el impacto de nuestros servicios en la generación de valor para los clientes.En este mundo tan globalizado, ¿qué lugar ocupa la especialización?

Un mundo económico globalizado requiere profesionales con visión global, sin olvidar la especialización tanto en áreas del derecho como en sectores emergentes, que son aquellos relacionados con las nuevas tecnologías, la biotecnología, etc. Reseñar igualmente la importancia de la gestión de los riesgos empresariales, y su impacto en el cumplimiento normativo.¿La clave para ser un buen abogado es su capacidad de seguir aprendiendo cada día?

La clave pasa por el inconformismo positivo. En esta sociedad cambiante y globalizada, no se puede ser reactivo, hay que adaptarse, porque lo que sirve hoy, no sirve para mañana. El mundo cambia continuamente y un hecho o acontecimiento en cualquier lugar siempre tiene una repercusión en nuestro entorno más próximo.


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