Tras celebrar 20 años de cooperación al desarrollo en la República Dominicana, el Grupo San Valero, a través de su fundación en Latinoamérica (FUNDOSVA), quiere extender su experiencia docente a Haití, donde "sería imperdonable" no actuar en pos del progreso y de la mejora de las condiciones de vida de las personas que viven en este país.

"La naturaleza le ha dado unos recursos envidiables a estos países, pero el progreso depende de la educación para formar excelentes ciudadanos con aquellos que no tuvieron la fortuna a su favor", remarcó el presidente del Grupo San Valero, Ángel García de Jalón, durante el primer acto del Ciclo de Cooperación Aragonesa para el Desarrollo, que se celebró el pasado miércoles en el Edificio Pignatelli de Zaragoza, organizado por el Grupo San Valero conjuntamente con el Gobierno de Aragón.

La jornada, dedicada al trabajo que realiza la Fundación Dominicana San Valero (FUNDOSVA), sirvió para poner en valor los logros y el impacto económico y social que la labor formativa del grupo ha tenido en este país de América Latina. De la mano de diferentes testimonios audiovisuales, José René Frías, director general de esta fundación dominicana del Grupo San Valero, mostró su agradecimiento a la sociedad aragonesa y a los diferentes agentes implicados por el trabajo realizado en el barrio desfavorecido de Los Guaricanos para "romper la espiral de pobreza en la que vivimos".

Ahora el reto de la fundación se encuentra en la necesidad de replicar este modelo educativo en la zona fronteriza del país "para impactar también en el desarrollo de Haití y mejorar las condiciones de vida de esa deprimida nación".