Con más de 900 conciertos y actuaciones en cerca de 20 países de todo el mundo, La Pegatina vuelve a la capital turolense, ciudad en la que sus espectáculos van camino de convertirse en todo un clásico de las fiestas del Ángel.  

Es el tercer año consecutivo que actuan en La Vaquilla, ¿qué les atrae tanto de esta celebración?

Para nosotros ir a Teruel significa desconectar y meternos en otro mundo. Siempre es una locura lo que se vive allí. Cada vez nos engancha más y nos tratan tan bien que queremos volver otra vez el próximo año. 

¿Han tenido la oportunidad de conocer la fiesta más allá del escenario?

Por desgracia lo que hacemos siempre es llegar a quitarle el pañuelo al Torico porque los días previos estamos de gira. Siempre venimos al final y vemos el final de una gran fiesta. Es como poner la guinda al pastel, la traca final que se diría. Vamos a darlo todo para que la gente se quede con un gran recuerdo y con un buen sabor de boca del último día. 

¿Cómo es el público turolense?

Sinceramente, es un público muy loco, muy entregado a la fiesta, muy agitado, muy enérgico... Además nosotros tenemos un directo muy participativo. 

Entre tanto fiestero,  ¿alguna anécdota curiosa?

Pues cada año tenemos un chico que se nos aparece disfrazado de mapache y nos lleva a visitar toda la ciudad, nos va paseando de carpa en carpa y consigue que siempre en Teruel salgamos hasta que amanece. 

En esos días, el ambiente aquí es muy intenso, ¿varían mucho el repertorio en este tipo de fiestas con respecto a otras actuaciones?

No, el repertorio es nuestro directo completo. Es un concierto para todos en el que tocamos los grandes éxitos de los cuatro discos, contamos con la participación del público y sobre todo con muchas sorpresas. La gente que se sabe nuestras canciones disfruta y los que no, también, porque combinamos nuestros temas con versiones de otros grupos. La gente va a poder bailar y desconectar durante dos horas en las que el buen rollo está servido.  

¿La gente incluso puede subir al escenario?

No suben por seguridad, pero nosotros bajamos al acabar el espectáculo y hacemos una batucada porque nos gusta estar lo más cercanos posible de nuestro público, que no sólo podrá cantar y bailar, si no que tenemos algunas novedades en esta gira que no se pueden desvelar. Para descubrir todas las sorpresas que tenemos preparadas, tienen que venir a vernos.  

¿Qué canciones sonarán seguro en Teruel?

Desde un ‘Mari Carmen’ hasta un  ‘Miranda’, ‘Alosque’, ‘Tomasín’... En definitiva es una selección de los grandes éxitos de todos los discos. La gira se llama ‘Lloverá y yo veré’. Es el segundo año de gira del cuarto álbum, de ‘Eureka!’, y hemos querido repasar toda nuestra carrera para que la gente pueda disfrutar al máximo. 

Antes de llegar a Teruel, estarán en Bélgica, hace unos meses estuvieron en China, ¿se acostumbra uno a este tipo de vida?

Es lo que llevamos buscando durante muchos años y es lo que nos gusta, nuestro trabajo, nuestra vida, nuestra ilusión y nuestro sueño. La gente viene a vernos y nosotros estamos igual de contentos tocando en Tarragona o en Teruel como en China, Japón o en cualquier lugar del mundo. Ahora mismo estamos a punto de embarcar hacia Bélgica, de ahí viajaremos al País Vasco francés y terminaremos la semana en Teruel. Normalmente solemos hacer alrededor de 100 conciertos al año y estamos muy contentos del recorrido que estamos haciendo con esta gira, está contando con muy buena aceptación.  

El último disco del grupo salió en 2013, ¿tenéis algún proyecto nuevo en el horno?

Sí, la intención es comenzar a grabar a final de año y en 2015 sacar un nuevo disco. Cada dos años solemos lanzar un álbum y cada año cambiamos el directo. También seguimos con la presentación del documental que es un reflejo de los 10 años de carrera que cumplimos el año pasado. Lo importante es no parar, tocar y tocar y si la gente se lo pasa bien, nosotros vamos a disfrutar encima del escenario e intentar transmitir eso a todo el que nos venga a ver.