'Cachiruled', baturros bailongos y tragachicos vivientes hechos por los más pequeños

Los elementos tradicionales de las fiestas se reinventan de la mano de la tecnología en los talleres infantiles que está desarrollando Etopia Kids.

Baturros  bailongos
Baturros bailongos
P. S.

¿Quién dijo que los clásicos protagonistas de las fiestas del Pilar no podían modernizarse de la mano de las nuevas tecnologías? Decenas de niños ya han comprobado que los elementos tradicionales de estas pueden reinventarse y ser personalizados al gusto en los talleres infantiles que la Fundación Zaragoza Ciudad del Conocimiento está llevando a cabo durante las jornadas festivas en el centro de arte y tecnología Etopia.


No es una propuesta nueva, ya que el año pasado debutaron con un taller de diseño e impresión de baturros en 3D y, a raíz de su éxito, la organización apostó por ampliar el número de actividades, basadas en el uso de tecnologías de código abierto, dirigidas a los más pequeños y a sus familiares en estas fechas. Así, el sábado, una veintena de familias vivieron el inicio de las fiestas con un cachirulo muy particular: cosieron a sus pañuelos  un circuito con batería incluida y pequeñas luces LED que se encendían con el movimiento y hacían brillar a sus portadores.


La acogida de esta primera actividad fue “buenísima”, pues “tanto los niños como los mayores se divirtieron mucho reciclando sus cachirulos”, cuenta Ana Quintana, directora de programación y contenidos de la Fundación Zaragoza Ciudad del Conocimiento. La también coordinadora de Etopia Kids explica que esta iniciativa pretende ser una alternativa tecnológica a las actividades infantiles que tienen lugar con motivo de las fiestas y “apuesta por llevar la tradición a su terreno para que los niños aprendan a utilizar las tecnologías creativas que caracterizan al espacio, a fabricar sus propios juguetes con las manos y a usar la herramientas tecnológicas de manera activa y no solo pasiva”. Además, en su compromiso con la reducción de la brecha digital, estas actividades cuentan con becas para aquellos niños que forman parte de programas sociales o que se encuentran en residencias o pisos tutelados.


Ya el lunes y el martes tuvieron lugar durante la mañana los talleres centrales del llamado ‘MakerPilar’. Los niños de 6 a 10 años elaboraron sus propios baturros bailongos a través de una dinamo sencilla programada para que, al sonar una jota, su personaje artesanal se moviese al ritmo, además de realizar una flor luminosa para la ofrenda. Mientras, los participantes de 10 a 14 años, tras una lluvia de ideas, diseñaron sus particulares versiones del cartel anunciador de las fiestas, que se harán realidad a través de impresoras 3D. “Han trabajado con programas muy sencillos de diseño gráfico, modelando volumen y dimensiones para después poder imprimir sus carteles”, relata Quintana.


La última actividad de los talleres temáticos tendrá lugar el próximo sábado y el elemento protagonista será el tragachicos. Dirigida a niños de entre 6 y 12 años acompañados de un adulto, consistirá en pintar, recortar y montar su personaje personalizado para después, con la ayuda de la empresa local Crom Developer, aprender a usar la tecnología de Arduino para que el tragachicos cobre vida abriendo y cerrando su boca.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión