5. Porque hay alternativas para mantener la movilidad

Si el puente de piedra fuese peatonal, los vecinos del Arrabal y de Barrio de Jesús no podrían cruzarlo en autobús o taxi, pero existen alternativas para que la margen izquierda no pierda transporte público. El propio consejero de Cultura y de Grandes Proyectos de la ciudad, Jerónimo Blasco, lo defiende: “La primera alternativa será el tranvía, que pasará por el puente de Santiago y solucionará el problema de los vecinos de esa zona”. Además, añade que “los autobuses se pueden mantener y reforzar” cuando las líneas se reestructuren por el tranvía.

La posibilidad de que el tranvía circule por el puente no es viable porque, según Blasco "el puente es un Bien de Interés Cultural y nunca se aprobaría". Lo que sí está probado es que la comunicación de los barrios no se interrumpe porque lo haga la circulación en el puente de Piedra. Durante más de año y medio y, con motivo de las obras de remodelación del Balcón de San Lázaro y del paseo de la Ribera, el tráfico de taxis y autobuses se paró, convirtiéndose los puentes de Hierro y de Santiago en las salidas del Arrabal y del Barrio de Jesús.

Una alternativa propuesta por el equipo de Teófilo Martín y Manolo Castillo, en el proyecto de revitalización del Casco Histórico elaborado para la candidatura de Zaragoza a Capital Cultural de 2016, es la puesta en marcha de microbuses eléctricos. "Los minibuses incluirían dos recorridos transversales por el Casco Histórico, uno de norte a sur y otro de este a oeste", explica el arquitecto Teófilo Martín. "Así se permitiría el transporte público por un centro de la ciudad peatonalizado", asegura.

Otra alternativa, saludable y sostenible, sería permitir la circulación de bicicletas por el puente, tal y como explica Perico Ruiz, del colectivo Pedalea.