Cosido con jazz
El Periferias Fashion Show se viste de negro.
Adela Alfaro, Be Romantic, Blanca Borrel, Diana Valdecantos, Giovanna Bittante, La Tate, Mañubio, Num Wear, Womynolas, Skándalo Delux y Mabel Agyapong son el resto de los diseñadores que presentan sus creaciones en torno a las derivadas que la negritud ha adquirido en su imaginación y en sus patrones. En la colección de esta última, la tradición de la cultura negra se verá en su máxima expresión, ya que esta africana afincadas en Huesca confecciona trajes para muchas compatriotas.
Es la única cita con la moda que existe en Huesca, dirigida por la diseñadora oscense Katia Aznar, y la única de estas características de Aragón. Por ello, también se apuntan muchos creadores zaragozanos para los que es ineludible. Es el caso de Teresa Terrén (Terrenteresa), que participa desde las primeras ediciones de esta pasarela en la que solo echa en falta una proyección comercial, ya que además resalta que ha mejorado mucho el planteamiento en los últimos años. En su colección, además de imprimir ritmo a sus diseños vanguardistas, se escucha la mezcla de la música negra. Terrenteresa tiene su propio taller y vende directamente allí o en tiendas en el norte y en Cataluña.
Por su parte, la oscense Adela Alfaro, de 19 años y estudiante de diseño de moda, aunque no comercializa su trabajo todavía, también cree que se debería completar con un showroom o con una feria para enseñar el producto. Con todo, valora la cita como «una plataforma buenísima para los diseñadores de Aragón». En su caso, mostrará seis looks completos de su colección Acordanza (significa recuerdo en aragonés), con la que moderniza los conceptos de los trajes regionales con propuestas actuales para las que usa tejidos propios del folclore como brocados, batistas o tiras bordadas.
El concepto black es lo que ha llevado a Artesviro Chus y Esther Vicente a teñir sus tocados con tonalidades oscuras y materiales propios de los años 50-60 en los que se han inspirado. El blues, el jazz... armonizan la media docena de tocados vintage que llevarán a Huesca desde su taller de Zaragoza, en el que ofrecen además formación en sombrerería y encaje de bolillos.
La oscense Virginia Allué, estilista y estudiante de diseño de moda de 22 años, ha asimilado el concepto black con la basura y el reciclaje para transformarlo en algo bello. Sus tres diseños están inspirados en una bailarina de una caja de música, que se ha construido a partir de cartón; un look más punky, con elementos metálicos; y un tercero con tela de arpillera con motivos florales como la cultura japonesa.
En el mundo del patronaje también va a entrar Num Wear los oscenses Jorge e Ignacio Melero y Mariano Mas para personalizar más su producto, que se basa en sus dibujos de teorías del absurdo. Camisetas, jerseys y sudaderas para ambos sexos se distribuyen por internet, en pequeñas tiendas y en la suya propia de Ramiro El Monje, 18, en Huesca. Están hechas al 100% con algodones orgánicos, bambú y en condiciones laborales justas y su idea es que en breve se fabrique todo en España. Mañana, más.