Van Gaal dejará en la grada a De Gea

?El Manchester United, que inicia mañana la Premier, no alineará al meta.

De Gea detiene el balón durante el amistoso del pasado 25 de julio frente al Barcelona.
De Gea detiene el balón durante el amistoso del pasado 25 de julio frente al Barcelona.
Josh Edelson/efe

Mañana, un día después de que el Manchester United conozca a su rival en la previa de la Liga de Campeones, el equipo inglés inaugurará la Premier League en Old Trafford ante el Tottenham; pero David de Gea no defenderá la portería de los ‘diablos rojos’. Salvo giro radical inesperado, el portero deseado por el Real Madrid tampoco se sentará en el banquillo del United, porque el técnico holandés tiene previsto dejar en la grada sin citar a De Gea, lo que se puede interpretar como un síntoma de fortaleza y autoridad del club y el entrenador, aunque realmente también suponga debilitar deportivamente al equipo y abaratar el traspaso del guardameta madrileño.


El hecho de que Van Gaal relegue a De Gea y no le vaya a incluir ni siquiera en la convocatoria representa un paso más en el acercamiento entre el portero y el club blanco. Aunque Van Gaal pretenda mostrar carácter y ser inflexible con el meta –la pasada temporada jugó todos los partidos hasta que se lesionó–, el técnico holandés ya asume su marcha. Igual que el Real Madrid acepta que tendrá que desembolsar más de los 25 millones que había ofrecido inicialmente por el jugador.


Es un órdago estratégico de Van Gaal. Desplazar a De Gea a la grada parece más una bravuconada del técnico que un pulso personal en el que el portero pudiera salir perdedor. Solo lo sería si al final no fructificase su fichaje por el Real Madrid, cuyo deseo era cerrar la operación por De Gea tras su regreso de la Audi Cup en Alemania y antes del inicio de la Premier League, aunque, a no ser que el fichaje se hiciese oficial hoy o mañana, deberá seguir esperando.

"La situación es complicada"

Sin De Gea, el titular bajo la portería del United sería el internacional argentino Sergio Romero, que aún no ha debutado; y el segundo, el inexperto Sam Johnstone, que ha completado una buena gira por Estados Unidos pero que ni siquiera ha jugado en la Championship. En el caso de Víctor Valdés, Van Gaal no quiere ya ver al exazulgrana en Manchester después de negarse a jugar la pasada temporada con el segundo equipo, extremo que el catalán niega. Mientras, la venta de Di María al PSG debe desbloquear y acelerar un traspaso al club blanco que se da por seguro.


A partir de ahora, Jorge Mendes, representante del extremo argentino y de De Gea, podrá dedicarse casi en exclusiva a negociar la salida del guardameta junto al director ejecutivo del United, Ed Woodward, y su homónimo del Real Madrid, José Ángel Sánchez. El club inglés reclama 42 millones por De Gea, pero sabe que el caso es ya irreversible y que deberá que desprenderse de él por una cifra inferior.


"La situación es complicada para todos. No beneficia a ninguna de las partes. Ni para nosotros, ni para el club que le pretende, ni para el jugador", aseguró Van Gaal tras el error cometido por De Gea, y que le costó un gol al United, en el amistoso de la pasada semana ante el PSG, después de haber brillado frente al Barça. Mientras, Keylor Navas continúa a la espera para aclarar su futuro, ya que el portero costarricense, que el miércoles firmó un partido notable ante el Bayern de Múnich, será el damnificado con el fichaje del guardameta español.

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