Sin grandes complicaciones porque los complementos del ERE ya estaban pactados en convenio pero con un compromiso importante, extender un año más los contratos indefinidos para relevistas, se cerró ayer el expediente de suspensión de hasta 30 días en General Motors en Figueruelas. Solo UGT y CC. OO. firmaron el acta de acuerdo, que recoge dos cambios sustanciales que ayer se comunicaron a la plantilla a través de la hoja del comité. Primero, que lo que había acordado con la empresa hasta el 31 de diciembre de 2015 de hacer fijos los contratos de relevo se estire un año más de tal forma que los 400 relevistas que se incorporen en 2016 puedan ser también indefinidos; y, en segundo lugar, extender a los nacidos en 1956 –y no a partir del año 1957, como se establecía hasta ahora– la posibilidad de acogerse al contrato de relevo.

Los sindicatos mayoritarios explicaron que ambas modificaciones no han supuesto "ninguna moneda de cambio" para aceptar el ERE porque "no guardan ninguna relación con él", pero sí reconocieron que necesitaban estas mejoras de cara a que la plantilla comprenda que es fundamental pactar en situaciones como esta en que "nos vienen dificultades de producción que hay que salvar entre todos".

Tanto CC. OO. como UGT mostraron su confianza en que este ERE sea coyuntural y el año que viene no sean necesarios nuevos expedientes. Si bien a las auxiliares desde GM España ya se les ha prevenido de que al año que viene el mercado puede sufrir también altibajos y tal vez sea necesario utilizar de nuevo esta medida de ajuste. No obstante, lo importante es el horizonte de ir avanzando poco a poco hacia la plena capacidad en 2017, cuando se produzca el lanzamiento de los dos nuevos modelos: el reemplazo del Meriva y el sucesor del C3 Picasso.

El acta de acuerdo del ERE en Figueruelas incluye además los días que van a parar, en concreto 21 turnos de ERE los lunes y viernes de junio, así como el 31 de julio en el turno de tarde. Ya no se fijaran más jornadas de paro técnico hasta la vuelta de las vacaciones, que será el 26 de agosto. Después, mes a mes, en función de cómo evolucione la demanda, se irán marcando los días de expediente.

Unos días que afectarán principalmente a la línea del Corsa, pero que servirán también para que de forma voluntaria operarios que trabajan en la línea del Mokka y el Meriva asistan a los cursos de entrenamiento que les habiliten también para trabajar en el Corsa. Algo que ya hicieron en su día los empleados del turno de noche y que busca precisamente que haya mayor rotación en la afección del ERE y que se reparta más entre todos.

Ayer, cuando se acordó el ERE, se fijó también el día 2 de enero como de vacaciones colectivas, junto a la semana del 24 al 31 de diciembre, que ya estaba marcado. Quedan todavía algunos días por señalar.

Mientras en GM en Figueruelas se cerraba ayer la negociación del expediente, todavía en muchas auxiliares seguían discutiendo sobre posibles acuerdos.

Con casi 1.800 trabajadores afectados hasta ahora, los proveedores tratan de acompasar su ritmo de producción al ajuste que acaba de pactar GM en Figueruelas y que se ha debido fundamentalmente a la decisión de la multinacional de salir del mercado ruso, lo que ha supuesto dejar de producir más de 20.000 unidades en la factoría zaragozana, ya que parece difícil en lo que queda de año encontrarles acomodo en otros mercados.

En algunas de las auxiliares ya se ha alcanzado un acuerdo, como en Lear Épila, donde se han pactado también 30 días de suspensión, o en Proma Hispania, con 60. En Gestamp Manufacturing Autochasis también se acordaron 28 días menos de producción y 33 en Colbus Sils. Es previsible que a lo largo de este mes sigan entrando más expedientes por parte de los proveedores.