Alós da por hecho el acuerdo de la izquierda para gobernar

La candidata del PP afirma que pasará a liderar “con responsabilidad” el grupo mayoritario de la oposición en Huesca.

Ana Alós compareció ayer con Antonio Torres en la sede del PP.
Ana Alós compareció ayer con Antonio Torres en la sede del PP.
J. broto

Ana Alós, candidata del Partido Popular y todavía alcaldesa de Huesca, ha decidido asumir la responsabilidad de continuar en el Ayuntamiento "defendiendo los intereses de los oscenses". Así lo anunció ayer, al tiempo que señaló que, con nueve concejales, el PP ha sido la fuerza más votada en la ciudad, "aunque eso no ha sido suficiente para tener opciones de gobierno en estos momentos".


La líder popular dio por hecho que se va a producir un pacto de izquierdas entre PSOE, Cambiar Huesca y Aragón Sí Puede para obtener la alcaldía de la capital oscense. No obstante, apuntó que la negociación para configurar este tripartito no va a ser sencilla "porque cada uno va a jugar la fuerza que tiene". "Nosotros estaremos a la espera de lo que ocurra para hacer el traspaso de poderes", añadió.


En el caso de que el acuerdo no se concretase, Alós estaría dispuesta, como lista más votada, a asumir el gobierno municipal. "Está claro que no tendríamos la mayoría absoluta, ni siquiera con un pacto con Ciudadanos, y deberíamos gobernar durante cuatro años negociando y consensuando las decisiones con el resto de grupos municipales", dijo.


Ana Alós compareció junto al presidente del PP en el Alto Aragón y número uno de la lista autonómica en Huesca, Antonio Torres, en un receso de la reunión del comité de dirección provincial convocada para analizar los resultados electorales. Torres incidió en que el Partido Popular de Aragón ha ganado las elecciones como lista más votada aunque reconoció que "no han sido los resultados esperados".

Al igual que el presidente provincial, Alós atribuyó la pérdida de votos respecto a 2011 (1.458 sufragios) a la "ola nacional" que se ha llevado por delante mayorías y alcaldías populares consolidadas por la situación del partido debido a los casos de corrupción. Además, asumió que algunos votantes del PP en Huesca no hayan estado de acuerdo con las decisiones municipales adoptadas en este mandato, en alusión a la peatonalización del centro.


Alós indicó que la decisión del Ministerio de Defensa de cerrar el cuartel Sancho Ramírez en 2016 y la autorización del Gobierno de Aragón de duplicar los dos grados de Magisterio en la Universidad San Jorge "nos han pasado factura". "Aunque desde nuestro ámbito local hemos defendido estas cuestiones con uñas y dientes puede ser que no haya sido suficiente para convencer a los oscenses", añadió.


A todas estas contingencias, Alós sumó la entrada en el panorama político de Ciudadanos, formación que, según dijo, ha restado votos tanto al PP como al PAR, aliado de los populares y que ha desaparecido de la corporación.


"Ciudadanos tenía muchas expectativas, pero no han conseguido ser una fuerza suficiente como para garantizar un gobierno de centro, moderado", dijo con cierto disgusto. Esta situación ha provocado, en su opinión, que en los próximos años el Ayuntamiento de Huesca tenga "un gobierno de izquierda radical".


Por su parte, Antonio Torres explicó que el PP puede tener en la provincia de Huesca más de 50 alcaldías. "Hay 45 que están aseguradas por los resultados y más de la mitad de las comarcas pueden estar pendientes de pactos con partidos cuyo programa sea parecido al del PP", indicó.


El presidente de los populares altoaragoneses manifestó que entre las formaciones de izquierda que han concurrido a las elecciones municipales y autonómicas se ha establecido un "cordón sanitario de todos contra el PP" y auguró para el nuevo Gobierno de Aragón "una etapa de inestabilidad".

Torres aseguró, por otro lado, que la decisión de la presidenta del partido, Luisa Fernanda Rudi, de abandonar la política regional "no generará tensiones internas que debiliten a la formación".