El director general de la Guardia Civil visita al agente herido durante el tiroteo de Ejea
El funcionario evoluciona favorablemente del disparo que recibió en una mano. El novio de la hija del agresor continúa en la uci.
Fernández de Mesa llegó de forma inesperada a la capital aragonesa a media mañana y sobre las 12.00, acompañado por el director adjunto Operativo del Cuerpo, el teniente general Cándido Cardiel, se presentó en el hospital. Allí fueron recibidos por el general jefe de la Zona de Aragón, Antonio Tocón; por el coronel jefe de la comandancia de Zaragoza, José Hermida; y el por teniente coronel jefe de la Unidad Especial de Intervención (UEI), con base en la localidad madrileña de Valdemoro, a la que pertenece el agente herido.
El guardia civil estaba acompañado por su mujer y su suegro, que reside en Málaga, y que permanecerán con él hasta que pueda volver a su casa de la comunidad de Madrid. También continúan con él varios compañeros de su unidad.
Horas antes del tiroteo, el vecino de Ejea discutió con su hija Pilar porque no veía con buenos ojos la nueva relación que había establecido con Rafael Laita, tras separarse de su marido. El jubilado pretendía que continuase conviviendo con este último, con quien tiene una niña. La negativa de Pilar le llevó a discutir con ella e incluso a amenazarla con un arma blanca. Ella informó de lo ocurrido en el cuartel de la Guardia Civil de Ejea y tres horas después, cuando pensaba que su hija y el novio de esta lo habían denunciado, los esperó cuando bajaban por la cuesta de La Llana y disparó sobre Rafael Laita. El tiro le atravesó la clavícula y permanece todavía en la unidad de cuidados intensivos del Hospital Clínico, donde evoluciona favorablemente. Tras la agresión, se encerró en su casa armado y disparó sobre los primeros agentes que llegaron para detenerle. A uno le alcanzó en un hombro aunque le protegió el chaleco antibalas. José Luis Cerdán fue abatido dentro de su vivienda a las 8.01 del jueves, después de una intensa noche en la que el negociador no logró convencerle para que depusiera su actitud y se entregara de forma pacífica.
Las primeras informaciones indican que el hombre pudo recibir entre cuatro y cinco disparos, aunque este dato no ha sido confirmado oficialmente y habrá que esperar al resultado de la autopsia. El juzgado número 2 de Ejea, en funciones de guardia en el momento de los hechos, es el encargado del caso.