Tres familias llegan a Valdelinares y Bello para garantizar la continuidad de sus colegios

Los pueblos, sin el mínimo de niños para conservar la escuela, ofrecen trabajo a parejas con hijos pequeños.

Tres familias con niños llegarán el próximo verano a las localidades de Valdelinares y Bello para garantizar la continuidad de sus colegios, en peligro el siguiente curso por falta del cupo mínimo de seis escolares exigido por el Departamento de Educación. Los nuevos vecinos se instalarán tras campañas de captación de parejas con menores en edad escolar lanzadas por los respectivos ayuntamientos. En tiempos de crisis y paro masivo, la expectativa de encontrar trabajo y vivienda a precio asequible ha sido aliciente suficiente para recibir una avalancha de solicitudes.


Valdelinares contó, además, con el apoyo de la campaña lanzada por la marca de coches Skoda para colaborar en la captación de una familia con niños menores de 12 años. Los anuncios divulgados a través de la televisión y de internet multiplicaron la repercusión mediática de la oferta municipal de trabajo por un año y casa por un alquiler simbólico. Más de seiscientas familias de toda España probaron suerte. Finalmente, la elegida es una pareja residente en Ribarroja del Turia (Valencia) con tres niños menores de siete años.


Teresa Lozano, que se encargó de coordinar la oferta del Ayuntamiento, señaló que el pueblo respira aliviado al "asegurarse" de que la escuela seguirá abierta el próximo curso. Solo tenía tres alumnos confirmados, pero con los recién llegados alcanza el mínimo de seis establecido por la Administración.


El Ayuntamiento se movilizó para atraer escolares porque si el colegio se hubiera cerrado en 2015 por falta de niños las posibilidades de reapertura hubieran sido muy escasas. Lozano señaló que, en caso de cierre, las familias con hijos en edad escolar se hubieran marchado en busca de trabajo a pueblos que dispusieran de este servicio básico. La hipotética reapertura del aula hubiera sido cada vez más "remota".


El próximo sábado una familia de Ribarroja llegará a Valdelinares para conocer el pueblo y participar en el rodaje del spot de Skoda que cerrará la campaña publicitaria ambientada en la localidad y titulada ‘Los setenta guardianes del invierno’. Uno de los objetivos de la operación de márquetin fue, además de promocionar la oferta de la compañía automovilística, contribuir a la llegada de nuevos pobladores. El fabricante de coches entregará un vehículo que usarán de los nuevos residentes y que dará servicio a toda la población.


La pareja formada por David Ruiz y Belén Rodríguez, ambos en paro, se trasladará definitivamente a Valdelinares el 1 de julio con sus tres hijos menores de 7 años. David explicó que se enteró de la iniciativa repobladora a través de la campaña de Skoda. Se mostró "encantado" con la idea del traslado. Respecto a los duros inviernos que le esperan en su nuevo hogar, consideró que la situación "no será tan extrema como la pintan". El Ayuntamiento espera ofrecerle trabajo en actividades forestales y en la estación de esquí de Aramón.


También Bello ha atado la continuidad de su escuela con la llegada de dos familias con un total de siete niños menores de 12 años. El alcalde, Jaime Barrado, confía en que los padres puedan encontrar trabajo en el albergue que un empresario acondiciona en un antiguo silo de cereal.


Barrado, una vez garantizada la permanencia de la escuela, consideró "perfecta" la solución alcanzada. Las dos familias seleccionadas –de entre 20 aspirantes– visitarán la localidad el próximo fin de semana para establecerse definitivamente en verano. Proceden de Daroca (Zaragoza) y Barbastro (Huesca). El alcalde explicó que para divulgar su oferta y contactar con candidatos el Ayuntamiento contó con la colaboración de la asociación SOS Mundo Rural Aragonés y la Federación Aragonesa de Municipios, Comarcas y Provincias.La polémica


La campaña del Ayuntamiento de Bello para captar familias con niños generó algunas críticas al alcalde porque su hija, de 11 años, cursa Primaria en la vecina Calamocha, donde el próximo curso iniciará los estudios de Secundaria. Jaime Barrado se defendió señalando que hay que diferenciar entre su labor al frente del Ayuntamiento y su actuación "a nivel personal". Barrado no quiso entrar en los detalles de por qué su hija estudia fuera del pueblo y se limitó a señalar que se debe "a temas particulares".