Esta situación se mantendrá al menos hasta el martes de la que semana que viene, cuando se espera que la llegada de otra masa de aire procedente del Atlántico atenúe la subida de los termómetros. No obstante, la propia Aemet recomienda estar atento a sus predicciones y actualizaciones para hacer seguimiento de este episodio.

Ayer ya se produjo un aumento de las temperaturas que en algunos puntos fue notable –hasta seis grados– y que provocó que en zonas de Zaragoza y Teruel las máximas se aproximaran a los 30 grados. El valor más alto del día se midió en Alhama de Aragón con 29,5 grados, y a continuación se situaron Quinto (28,9), Calamocha (28,7), Alcañiz (28,6), Calatayud (28,5)y Zaragoza capital (28,3).

Siempre según las previsiones de la Aemet, hoy y mañana se espera que las temperaturas sigan subiendo, pero será el domingo cuando la entrada de una masa de aire africano dispare los termómetros por encima de los 30 grados en gran parte de Aragón.

Es posible que la entrada de la masa de aire atlántico se produzca el mismo martes, pero ese día solo afectará al noreste de la Península. En Aragón, sus efectos se dejarán notar ya el miércoles.

De cumplirse estos pronósticos, la Comunidad va a vivir unos días de fuerte calor más propio del verano en plena primavera. No obstante, no parece que vayan a batirse los récords históricos de mayo. En Zaragoza, el valor más alto medido durante este mes fueron los 36,5 grados que se registraron el 29 de mayo de 2001;en Huesca, el 23 de mayo de 1953 se llegó a 34,2 grados;y en Teruel la efeméride se estableció el 17 de mayo de 2006 con 34,6 grados.

Esas máximas estuvieron hasta 13 grados por encima de los registros normales a estas alturas del año. Esos valores, calculados como el promedi o del periodo 1981-2010, indican que lo habitual es que en Zaragoza en mayo las máximas ronden los 24,1 grados;que en Huesca se sitúen en torno a los 22,3 grados;y que en

Teruel estén alrededor de los 21,8 grados.