Worldpathol pone en marcha su área de fabricación y prevé triplicar su plantilla hasta 2019

La firma aragonesa de biotecnología espera multiplicar por siete su facturación en dos años.

Las nuevas instalaciones de Worldpathol en el polígono Empresarium, dotadas de tecnología punta.
Worldpathol pone en marcha su área de fabricación y prevé triplicar su plantilla hasta 2019
A. Alcorta

Worldpathol se convirtió en empresa en 2012 cuando tras ganar el concurso Idease se instaló en el vivero de empresas del CEEI Aragón en Zaragoza. Entonces eran cuatro socios y un trabajador. Pero su corta historia está cuajada de inversiones, crecimiento y generación de empleo. Ahora, apenas tres años después, la compañía biotecnológica aragonesa, dedicada al desarrollo de vacunas, nuevas formulaciones o moléculas alternativas, ocupa unas nuevas instalaciones de más de 1.000 metros cuadrados en el polígono Empresarium de Zaragoza, dotadas de las más modernas tecnologías y en las que, de momento, han invertido 3,37 millones.


Y es solo el principio. La planta, que aunque está en funcionamiento desde marzo del pasado año fue inaugurada ayer oficialmente por el consejero de Industria del Gobierno aragonés, Arturo Aliaga, ya está preparada para comenzar la fabricación de compuestos alimenticios para humanos y principios activos farmacéuticos. A la vuelta de la Semana Santa pondremos en marcha la primera de las divisiones de fabricación, que tiene capacidad para producir 700 toneladas, que adquieren un valor de 4 millones de euros", explicó el consejero delegado de Worldpathol, Iván Galindo. Después, está prevista la llegada de otras cinco máquinas –de diversos tamaños– para lo que se realizará un nuevo desembolso que elevará la inversión total hasta los 5 millones de euros en 2016.


"Con el área de fabricación necesitaremos más personal y posiblemente tengamos que ir a un doble turno", detalló Galindo, que explicó que la firma aragonesa prevé incrementar su plantilla –actualmente formada por 16 veterinarios, biólogos, biotecnólogos, médicos o químicos analíticos– hasta los 21 trabajadores para ir progresivamente aumentado hasta sumar los 50 empleados en 2019.


Cuatro unidades de negocio


Con cuatro unidades de negocio –Biotecnología (investigación sanitaria e I+D+i); Estudios Preclínicos (centro de análisis clínico-patológico); Innovación y nuevas tecnologías (formación online para profesionales de la sanidad, investigación médica y desarrollo de productos biológicos) y Worldpathol Wellbeing (investigación y desarrollo de nuevas formulaciones de complementos alimenticios para la mejora de la salud humana)–, la firma aragonesa desarrolla sus propios productos pero también trabaja a demanda de sus clientes, generalmente ganaderos que tienen una necesidad sanitaria con los animales.


"Forma parte de nuestro modelo de negocio fundacional. Pensábamos que teníamos que unirnos con los productores que al final son los receptores de los medicamentos o no iba a haber futuro", explicó Galindo, que puso como ejemplo su acuerdo estratégico con el Grupo Pastores para el desarrollo de una vacuna para el síndrome diarréico del cordero.


Pero también han traspasado fronteras. Worldpathol trabaja con la empresa norteamericana Harris Vaccines en un proyecto "muy ilusionante", como lo definió el consejero delegado. Basado en la patente con la que cuenta esta empresa, que espera conseguir otras dos el próximo año, ambos laboratorios trabajan en el desarrollo de una vacuna de cuarta generación contra la enfermedad de glässer del porcino, un patógeno que, según destacó Galindo, es la tercera causa de muerte en cerdos por bacterias en Europa y el segundo problema en importancia para los productores americanos. Galindo explicó que el acuerdo con la firma estadounidense incluye la comercialización conjunta tanto en Europa como en Estados Unidos. Eso sí, puntualizó, "la fabricación se hará siempre aquí".


Con todo ello, Worldpathol, que prevé cerrar 2015 con una facturación de 500.000 euros, espera que su volumen de negocio se multiplique por siete en dos años.