Tragedia en el deporte francés

Una nadadora, una regatista y un boxeador galos fallecen en un accidente aéreo en Argentina junto a otras siete personas.

Alexis Vastine
Tragedia en el deporte francés
Lee Jae Won/reuters

Tres grandes deportistas franceses, la vigente campeona olímpica de natación Camille Muffat, el boxeador Alexis Vastine y la regatista Florence Arthaud figuran entre las diez personas fallecidas al chocar en la madrugada de ayer dos helicópteros en la provincia argentina de La Rioja. Los muertos son los dos pilotos locales y ocho franceses que participaban en la grabación de un programa de supervivencia, ‘Dropped’, para el canal de televisión galo TF1, que iba a emitirse en unos meses. El accidente se produjo en cercanías de la localidad de Villa Castelli, departamento de General Lamadrid, a unos 400 kilómetros de la capital provincial. Los cuerpos de los fiez fallecidos pudieron se recuperados durante la jornada de ayer y fueron trasladados a La Rioja para proceder a la autopsia.


Los motivos del accidente se desconocen. Los helicópteros chocaron en el aire en una zona despejada y con condiciones meteorológicas óptimas, apenas unos minutos después de despegar de un enclave próximo a la localidad de Villa Martelli. El accidente ha conmocionado a Francia y al resto del mundo ya que viajaban tres personalidades deportivas reconocidas.


A sus 25 años, la nadadora Camille Muffat había amasado ya un palmarés impresionante: tres medallas olímpicas, cuatro bronces mundiales, oro en piscina corta y todos los títulos posibles en Francia. Suficiente para que, cuando anunció el pasado verano que abandonaba la competición, provocara una estupefacción general. "Quiero disfrutar de la vida", afirmó entonces la atípica deportista.


En su agenda, aseguran sus allegados, figuraban muchos proyectos, como saltar en paracaídas o viajar a los cinco rincones del planeta. Y también participar en un concurso de ‘telerrealidad’. Fuera del agua, Muffat era la antítesis de Laure Manaudou, la referencia de la natación francesa de los últimos años. Más tímida e introvertida, apenas aparecía en la televisión, a diferencia de Manaudou.


Pero en la piscina su palmarés era muy similar. De hecho, el nombre de Muffat saltó a la palestra cuando en 2005, con 15 años, batió a una Manaudou en la plenitud de su carrera. Fue el inicio de un rosario de éxitos coronados con el oro olímpico en Londres 2012 en los 400 metros libre, acompañado de la plata en los 200 metros libre y el bronce en el relevo 4 por 200. La sirena española, Mireia Belmonte, quiso despedirse de ella a través de un mensaje en twitter: "Cuando alguien se va, comprendes que todos los problemas tienen solución. RIP Camille Muffat".


Mucho más mediática en Francia que Muffat, la regatista Arthaud, de 57 años, era un símbolo de conquista de terrenos vedados a las mujeres. En 1990 se convirtió en la primera mujer –y la única por el momento– en ganar la Ruta del Ron, una de las regatas en solitario más duras y prestigiosas del mundo, un triunfo que le otorgó fama y gloria lejos de los barcos.


Aparecía en los medios, escribió varios libros e, incluso, grabó algunas canciones junto a Pierre Bachelet. Encontró la muerte en Argentina tras haberla esquivado en varias ocasiones. La primera cuando, con 17 años, un accidente de coche la sumergió durante meses en el coma y la dejó medio año paralizada y desfigurada. Una prueba de la que salió completamente transformada y con la fuerza suficiente para afrontar otro tipo de vida del que le prometía su familia. En 1986 volvió a coquetear con la muerte cuando, en plena Ruta del Ron, acudió a rescatar a otro marino en medio de una gran tempestad que estuvo a punto de tragarse a ambos. Hace cuatro años, cuando navegaba sola por aguas del Mediterráneo, cayó al agua y vio cómo el barco se alejaba. Salvó la vida gracias a un teléfono móvil impermeable que había comprado unos minutos antes de embarcar y que le permitió pedir auxilio.


Los padres del boxeador Alexis Vastine lloraban ayer la muerte de su hijo y la desgracia repetida, porque a principios de año habían perdido a su hija menor en un accidente de coche. Lágrimas que el boxeador había conocido en su carrera, marcada por el sueño olímpico que se le escapó en dos ocasiones y que no podrá completar en Río de Janeiro. Francia recuerda a Vastine llorando sobre el ring. Primero en 2008, cuando los árbitros le descalificaron en un combate que dominaba contra el dominicano Félix Díaz. "No hay derecho", repetía entre lágrimas el deportista que, cuatro años más tarde, repitió la escena cuando los jueces le dieron perdedor frente al ucraniano Taras Shelestuik. Fueron dos derrotas que este deportista enrolado en el ejército vivió como injusticias y que le llevaron a refugiarse en el entrenamiento como terapia, con la vista puesta en Río y en el título olímpico.


Junto a estos tres deportistas fallecieron otros cinco franceses, técnicos del equipo de rodaje, y los dos pilotos. También habían participado en el mismo programa de televisión la ciclista Jeannie Longo, el exnadador Alain Bernard y el expatinador Philippe Candeloro, aunque ya habían sido eliminados del concurso.