Dos hermanos en la cima

Pau y Marc entrarán esta madrugada en la leyenda del baloncesto como titulares en el All Star de la NBA. Los Gasol protagonizarán el salto inicial en el Madison Square Garden, a partir de las 2.30 (Canal +).

Pau y Marc Gasol posan como dos de las estrellas más excepcionales de la NBA
Dos hermanos en la cima
NBA

Hay momentos que nacen históricos, casi legendarios. Son hechos excepcionales que trascienden a su propia condición –en este caso deportiva–, para instalarse en la memoria colectiva. Pau y Marc Gasol protagonizarán esta madrugada una gesta que reposará en la orla de honor del baloncesto español y mundial. Por primera vez en la historia, dos hermanos serán titulares en el Partido de las Estrellas de la NBA, la cita más exclusiva en la elite planetaria. Un éxito sin precedentes que traspasa una nueva frontera que hace unos pocos lustros se antojaba infranqueable, pura ciencia ficción.


Como la plata de Los Ángeles en 1984, el oro de Saitama en 2006 o el primer anillo de Pau en 2009. Pese a tratarse de un partido de carácter amistoso y de lucimiento, el encuentro que se disputará a partir de las 2.30 en el mítico Madison Square Garden de Nueva York, reposará en el mismo estante de méritos. Por su carácter simbólico y por aniquilar –si era necesario– el último resquicio de complejo de inferioridad en la canasta nacional. Un camino que inició Fernando Martín en 1986, al abandonar su zona de confort en el Real Madrid para ingresar en un ambiente hostil en los Portland Trailblazers. Un desafío que apenas alcanzó una temporada de duración, pero que esparció la semilla que hoy germinará en la Gran Manzana.


Juanma López Iturriaga, compañero de Martín en la selección y en el Real Madrid, verbaliza este particular aterrizaje en la Luna: "Lo que van a conseguir los Gasol en este AllStar es alucinante. Sobre todo para mi generación. Cuando nosotros nos enfrentábamos a los jugadores americanos, les teníamos un respeto tremendo, prácticamente reverencial. Nos superaban ampliamente por su físico, contra el que no teníamos respuesta. La final de las Olimpiadas de Los Ángeles es un buen ejemplo. Pues bien, los Gasol y compañía han terminado con esa distancia y están a la misma altura que las estrellas de hoy en día. De hecho, ellos son las estrellas. Hay que disfrutarlo".


Tres décadas después de aquella plata californiana que supo a gloria bendita, la excelencia forma parte de una cotidianidad que conviene ensalzar. Por insólita y porque no es probable que se repita.


Pau y Marc son plenamente conscientes de la magnitud de su proeza. La gozan y la ubican. "La familia lo vive de forma diferente y con mucho orgullo de ver a los dos niños en este escenario tan especial. Cuando éramos pequeños, un AllStar era de otro planeta, de otra galaxia. Las sensaciones que tengo son increíbles, indescriptibles. Viviremos un momento histórico que hasta hace muy poco no me he creído, y que a medida que se acerca el encuentro empiezo a ver como una realidad", explicó el primogénito de la saga de Sant Boi en una concurridísima rueda de prensa que tuvo lugar el viernes en Nueva York.


Para Pau, este Partido de las Estrellas encierra una recompensa especial, de reivindicación a sus 34 años. "Siempre intento predicar con el ejemplo para mis hermanos y para los niños que me admiran. Estoy muy orgulloso del camino que hemos recorrido y por todo lo que estamos consiguiendo y al nivel que hemos llegado. Hemos trabajado muchísimo", confesó.


Marc, cuatro años menor, devora su plenitud baloncestística. Ansía que el balón vuele para pelear en el salto inicial con su querido hermano. "El salto inicial tendrá un simbolismo especial por ser hermanos, por venir de donde venimos y por representar lo que representamos. Como jugadores de baloncesto tenemos unos valores humanos bastante positivos", aseveró.


Será un pequeño salto para los Gasol, pero un gran salto para todo un país.