Las peñas, espíritu de la fiesta

El desfile de ayer, aunque cívico y lúdico, se había convocado como si fuera una manifestación. Los peñistas lanzaron ‘chinitas’ al Ayuntamiento y pusieron por megafonía cortes de voz con las promesas incumplidas del alcalde.

El descarado Rey de Gallos, como es costumbre, no dejó títere con cabeza
Las peñas, espíritu de la fiesta
Guillermo Mestre

Las peñas, combativas y guerreras como acostumbran, decidieron ayer priorizar la fiesta frente a sus reivindicaciones y protagonizaron en las calles un desfile –diríase– de guante blanco. El divorcio entre peñas y Ayuntamiento volvió a hacerse patente por el corazón de la ciudad con una breve manifestación que precedió al paso de las carrozas y las comparsas. Representantes de las 26 asociaciones portaron una pancarta en la que se especificaba que el desfile estaba financiado por las propias peñas y repartieron octavillas en las que aseguraban que "los peñistas no buscamos reconocimientos, tan solo que nos dejen hacer". "Estamos aquí para estar unidos, no para polemizar. Vamos a procurar disfrutar de quienes tenemos al lado, porque son todos buenos amigos", comentaban ayer en los corrillos.


Braulio Cantera, presidente de la Federación, había pedido a los suyos una protesta lúdica y cívica, y así fue como transcurrió la marcha.Sí hubo algún que otro ‘recadito’ al concejal Jerónimo Blasco y al alcalde Belloch, pero siempre desde un prisma humorístico, un tanto somarda y casi rozando la chirigota. Hubo alusiones a que ambos políticos están en desbandada –dado que ninguno se presenta a las próximas elecciones de mayo– y volvieron a escucharse también críticas contra la ley de Espectáculos del Gobierno de Aragón, que impide a los menores entrar en recintos festivos donde se dispense alcohol.


Como es costumbre, el más descarado fue el Rey de Gallos, quien poco después de su liberación dedicó perlas a los políticos no solo aragoneses sino de todo el espectro nacional. Se vino a decir que Mariano Rajoy es un títere de Angela Merkel, que a Pedro ‘el guapo’ no sabe por dónde le da el aire y que Pablo ‘el coletas’ –de momento– es "un dolor de cabeza" para los dos anteriores, pero poco más que eso.Sin pabellón ni subvención

El Rey de Gallos aprovechó la megafonía de su tribuna para poner cortes de voz con las promesas incumplidas tanto del alcalde Belloch como de Jerónimo Blasco. El primero les prometió como sede estable un pabellón que aún no existe y el segundo –y aquí es donde surge el ‘casus belli’ de este carnaval– apostó por ampliar el convenio con Interpeñas hasta los 100.000 euros, cosa que –lejos de producirse– ha acabado en denuncias por impagos. Reclaman los peñistas los 55.000 euros acordados como contrapartida por organizar el carnaval del año pasado, que aún no han recibido a pesar de que el pasado mes de mayo el concejal socialista se comprometió a hacerlo en una asamblea de la Federación.


Así las cosas, Interpeñas decidió este 2015 ‘partir peras’ con el Ayuntamiento y tan enfadados estaban que ni siquiera quisieron pedir permiso al área de Servicios Públicos para montar el desfile de ayer. Por elevación, optaron por acudir directamente a la Delegación del Gobierno para solicitar una autorización de manifestación, si bien la marcha fue un tanto ‘sui géneris’ con decenas de héroes de cómic, pelucas pasadas por agua y batucadas a cargo de personajes animados de los años 80.


Los únicos que acudieron a la fiesta sin disfrazar fueron representantes de las 26 asociaciones que vestían sus tradicionales petos frente a la pancarta en defensa de las fiestas populares. Cantera, arropado del resto de portavoces, recordaba ayer que, "durante 30 años y sin afán lucrativo", los cerca de 20.000 peñistas que aglutina la Federación han sido el espíritu no solo del carnaval sino de casi todas las festividades que se celebran en Zaragoza. El Jueves Lardero (en el que ya marcaron distancias hace tres días), la Cincomarzada, San Jorge o el Pilar –con su maratón de charangas y su pregón– son algunas de las citas en las que las peñas reivindican su protagonismo.


También en el pregón hubo referencias a la polémica de las carpas durante las fiestas del Pilar, si bien los mayores vítores se produjeron cuando el Rey de Gallos brindó por el futuro del Real Zaragoza y recordó el gol de Nayim.