Siglo y medio de legado cultural

Paneles con imágenes históricas en blanco y negro de los pasos y grupos desfilando por escenarios de la Huesca del siglo XIX, trajes de romanos y de sibilas, las cruces de las Siete Palabras, el paso de la Cama, tambores, estatutos de 1930, programas del Santo Entierro de finales del siglo XIX, medallas de las cofradías, estandartes, un mazo de cabecero artesanal hecho con un tronco de árbol, una almohadilla de costalero, un candil de carburo... Estas son solo algunas de las valiosas piezas que la Archicofradía de la Vera Cruz de Huesca ha sacado de sus almacenes y archivos para conmemorar el 150 aniversario de la Semana Santa oscense con una exposición que se inauguró ayer en el Centro Cultural Ibercaja y que estará abierta hasta el 28 de febrero de 10.00 a 13.00 y de 18.00 a 21.00.

José María Nasarre, delegado de Patrimonio de la diócesis de Huesca y comisario de la muestra, explicó que aunque existen "indicios" de la Semana Santa oscense del siglo XVI "la manera en la que la concebimos hoy en día se debe a Celestino Vila, que fue prior de la Arhicofradía y que configuró en 1865 el diseño actual, aunque luego ha tenido pequeñas modificaciones". Entre los diversos objetos de la exposición destaca el paso del Ángel de la Muerte "que ya no se saca en las procesiones porque la tradición dice que había un fallecimiento frente a la casa que se paraba cada año".

Loren Lairla, mayordomo primero de la Vera Cruz, agradeció las aportaciones que hizo en su día Celestino Vila, un sacerdote leridano que fue nombrado con 27 años maestro de capilla y organista de la catedral de Huesca, "y también todas aquellas personas que le sucedieron, priores, mayordomos, cofrades y colaboradores anónimos que a lo largo de los años han custodiado y cuidado de los pasos". Un legado que, añadió, les anima a seguir trabajando en el presente y en el futuro "con la esperanza de que el patrimonio religioso que hoy está en nuestras manos perdure en las generaciones futuras".

Antes de bendecir la muestra, el obispo, Julián Ruiz, señaló que ofrece "una triple dimensión de información, de expresión de vivencias y también de interpelación, porque cuando vemos a Cristo que sufre acompañado por tantas personas que han compartido su dolor quedamos conmocionados". Y animó a colaborar "para que la Semana Santa oscense cobre nuevos bríos". Mientras, el prior de la Archicofradía, José Antonio Satué, aseguró que la exposición no va dirigida solo a los creyentes "sino a cualquier persona que quiera descubrir que la fe es capaz de generar arte y también valores que nos ayudan a la convivencia".

A la inauguración acudió también la alcaldesa de Huesca, Ana Alós, quien felicitó "a las miles de personas que durante años han mantenido viva esta devoción y este patrimonio cultural".