Divulgación de tres pistas... o más

La divulgación de la ciencia actual camina hacia su público por senderos de lo más diverso: el papel de una revista, su edición digital, los blogs, las redes sociales, el arte de la ilustración, los programas radiofónicos, la música, los monólogos científicos, el microrrelato e, incluso, el ambiente distendido de un bar junto a una caña de cerveza. Un poco de todo esto compuso la receta de la VI Jornada de Divulgación Innovadora organizada el pasado viernes por la Unidad de Cultura Científica de la Universidad de Zaragoza, en la que esta vez se divulgó también un tema específico: la comprensión del cerebro.

Lorena Sánchez, redactora jefe de 'Quo', interviene en el aula magna del Paraninfo.
Divulgación de tres pistas... o más
Fabián Simón

El circo fue bautizado a mediados del siglo XIX como ‘el mayor espectáculo del mundo’ y, con el mismo empeño de fascinar al público, Lorena Sánchez, redactora jefe de ‘Quo’, utiliza la metáfora del circo de tres pistas para explicar cómo se ha adaptado una revista de papel cuando "todo ha cambiado en la comunicación desde el siglo pasado". Su intervención fue el plato fuerte periodístico del programa de la VI Jornada de Divulgación Científica.


En cada pista, un espectáculo distinto pero con una misma clave del éxito: números de calidad en las tres pistas. "El papel sería el elefante, en la web evolucionan los equilibristas y las redes sociales son el maestro de ceremonias, el que llama tu atención e invita a pasar", describió vívidamente.


También, en cada pista, un reloj distinto: "Un mes para pensar el contenido del papel, 24 horas para el de la web y 20 minutos en las redes sociales". Al manejar plataformas distintas, "estamos sujetos a la regla del espacio-tiempo: en papel cabe muy poco, por lo que el contenido tiene que ser exquisito; internet es infinito, no tiene fondo, pero su tiempo es inmediato". Pero Sánchez señaló que lo que hace valioso a un medio es que ofrezca contenidos propios. Hay noticias que "las vemos en blogs y webs con el mismo texto y me da rabia porque no están elaboradas y se lleva el gato al agua la mejor posicionada, tienen un tiempo mínimo de relevancia". Por eso ve la pista digital del circo como la de los equilibristas, ya que, por otro lado, el propio medio digital te exige "ser rápido, estar permanentemente refrescado, porque el consumidor de la web es voraz".


De twitter a la portada


En ‘Quo’, muchas veces se usa la misma materia prima en los tres foros, vinculándolo todo. Lorena Sánchez lo contó con un ejemplo que llevó un tema de las redes sociales a la portada de papel. Todo empezó con una pregunta lanzada en Twitter: "¿A qué problemas crees que se enfrenta la medicina moderna?". Con el ‘hashtag’ #MedicinaEnCrisis, recibieron decenas de respuestas, algunas de médicos, que dieron lugar a dos artículos semanales en Quo.es. Pero, en paralelo, el periodista ‘elefante’ iba investigando y elaborando reportajes más profundos que se recogieron en un dosier de 16 páginas que fue portada de ese número de la revista. Un exitoso ‘más difícil todavía’.


Por amor a la ciencia


A la labor divulgativa ejercida desde el ámbito profesional se suma la aportación voluntariosa de científicos deseosos de acercar la ciencia al público de a pie. Un partido que también se juega en muchas pistas distintas. Así lo contó Fernando Gomollón, doctorando en el Instituto de Síntesis Química y Catálisis Homogénea (ISQCH, CSIC-UZ), en una ponencia titulada ‘Divulgando con silicio, ondas y... ¿cerveza?’.


En su caso, divulga desde blogs como ‘Moléculas a reacción’, que trata de hacer accesible la ciencia y dar visibilidad al ISQCH "hablando de química, actualidad, curiosidades e historia". Están a punto de alcanzar las cien entradas y sus historias de química llegan hasta Sudamérica. Escribe también en ‘Principia’, "una web muy visual para contar la ciencia de otra forma, sin textos largos ni fórmulas", con una fuerte apuesta por la ilustración, proceso de revisión, editor y guía de estilo. Y todo, "por amor al arte". Además, Gomollón coordina el equipo que, en mayo, invitará a ciencia a los zaragozanos en tres bares de la ciudad, en el marco del festival internacional ‘Pint of Science’.