"Los españoles no se plantean venir aquí"

El director de un centro con más de un 50% de alumnos árabes destaca el hándicap del idioma.

Ndiaye, Bendjeriou, Li… Son apellidos de niños de un colegio de Zaragoza donde más del 50% de su alumnado es de origen árabe, y también hay muchos sudamericanos y chinos. "El problema de este centro

–incide su director, que pide el anonimato- no es que tengamos muchos estudiantes de nacionalidades diferentes, sino que se concentran muchos con necesidades de apoyo educativo por no tener un nivel de español acorde con la edad o por los problemas económicos de sus familias. Hasta que el alumno no aprende español es muy complicado que avance".


La ley permite que a un inmigrante que acaba de llegar se le escolarice hasta un curso por debajo de su edad, pero este director entiende que la solución no es esa: "Si un extranjero llega en 4º de primaria con notas excelentes, no hace falta que le expliquen si un animal es un mamífero o un reptil. Eso lo sabe. Lo que quiere y necesita es aprender español para expresar lo que sabe y seguir avanzando".


En su opinión, la solución pasa precisamente por lo que ha indicado la sentencia del TSJA: fijar un cupo máximo de escolares con necesidades educativas por centro. "No es lo mismo atender en una clase a ocho alumnos que no saben español que a 16", dice. Añade que no le importaría que el 100% de los estudiantes fueran inmigrantes, pero ve necesario que una parte de cada clase no tenga necesidades especiales para ‘tirar del carro’ y ayudar al resto. "Los españoles deciden no traer a sus hijos cuando ven que hay tantos inmigrantes. Los españoles son aquí minoría. ¿Es eso el llamado enriquecimiento cultural?", se pregunta.