El Gobierno ucraniano y los prorrusos se acusan de dilatar la reanudación del diálogo

Los rebeldes se muestran dispuestos a hablar "antes de fin de año", tras producirse el intercambio de prisioneros.

Foto facilitada por el Gobierno ucraniano con el presidente Petro Poroshenko (izquierda) recibiendo a los presos liberados el viernes.
El Gobierno ucraniano y los prorrusos se acusan de dilatar la reanudación del diálogo
Afp Photo

Las autoridades ucranianas y los separatistas prorrusos se acusaron ayer mutuamente de dilatar la reanudación de la negociaciones para el arreglo del conflicto en el este de Ucrania, después del masivo intercambio de prisioneros que tuvo lugar este viernes.


"En el proceso negociador los terroristas tiene una postura que no es constructiva, dilatan las negociaciones y recurren a provocaciones", declaró el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional y Defensa (CSND) de Ucrania, Andrei Lisenko.

Según Lisenko, tres militares ucranianos resultaron heridos en las últimas 24 horas en la zona del conflicto, pese a la tregua implantada el pasado día 9.


El portavoz indicó que las milicias prorrusas acumulan armas y pertrechos y que "junto a la línea de separación de fuerzas instalan hospitales de campaña".


Los prorrusos, a su vez, se declararon dispuestos a reanudar antes de que termine el año las negociaciones para el arreglo del conflicto, y achacaron a Kiev la responsabilidad por dilación de las conversaciones.


"Vamos a hacer lo posible para la que nueva ronda (de negociaciones) del Grupo de Contacto (Ucrania, Rusia, los separatistas prorrusos y la OSCE) tenga lugar antes de fin de año", dijo el negociador jefe de las autoproclamada república popular de Lugansk, Vladislav Deinego, a la agencia rusa Interfax.


Deinego no excluyó la posibilidad de que la reunión se celebre "mañana" (por hoy) y agregó: "Nosotros estamos dispuestos. Esperamos la respuesta de Kiev".


Anulada a última hora


Por su parte, el representante de los secesionistas prorrusos de la región de Donetsk, Denis Pushilin, manifestó que de momento no tiene información sobre cuándo se reanudarán las negociaciones. El Grupo de Contacto tenía previsto reunirse el viernes en la capital bielorrusa, en que iba ser la segunda ronda de negociaciones de esta semana, pero la reunión fue anulada a última hora.


"Todavía no contamos con información sobre la fecha de la segunda ronda de negociaciones. Desconocemos también en qué formato se celebrará, si será presencial, con la participación de los miembros del Grupo de Contacto, o a distancia, con el uso de internet", dijo Pushilin.


Pese a la cancelación de la reunión de ayer en Minsk, conversaciones, las autoridades ucranianas y los separatistas realizaron este viernes un intercambio masivo de prisioneros de guerra: 146 soldados ucranianos por 222 milicianos prorrusos.


Los secesionistas prorrusos liberaron ayer a otros cuatro prisioneros ucranianos, tres militares y un civil, en cumplimiento del acuerdo de canje alcanzado el miércoles pasado.


5.000 muertos


El intercambio de prisioneros ha sido el último avance en el proceso de negociador para el arreglo pacífico al conflicto armado en el este de Ucrania, que se ha cobrado cerca de 5.000 muertos y provocado el éxodo de cientos de miles de refugiados.


Sigue pendiente el cumplimiento de una serie de puntos adoptados en el Memorándum de Minsk, sellado el 19 de septiembre, como el repliegue del armamento pesado, la creación de una zona de seguridad de 30 kilómetros de profundidad y la apertura de corredores para cargas humanitarias.


El expresidente del Parlamento y actual secretario del CSND, Alexandr Turchínov, ha advertido de que si el proceso negociador fracasa, a las autoridades no les quedará más remedio que implantar la ley marcial en el país.


"En caso de que el formato pacífico no dé frutos, no tendremos otra alternativa", dijo Turchinov en una entrevista con el Canal 5 de la televisión ucraniana.


Aseguró que el presidente de Ucrania, Petro Poroshenko, hace todo lo que está en su mano para llegar a un arreglo pacífico al conflicto el este del país, pero advirtió de que el jefe del Estado "no titubeará ni un minuto cuando sienta que no hay otra vía que la de las acciones militares".